Recuerdo de Pedro Infante conquista a nuevas generaciones en Mérida

 

Mérida, 15 Abr (Notimex).- Los meridanos parecen no estar dispuestos a que el recuerdo de Pedro Infante se pierda en las nuevas generaciones y con devoción, cariño y esfuerzo han logrado transmitir y mantener el legado del ídolo a 62 años de su muerte. Este 15 de abril se cumplió un año más del fatídico […]


Mérida, 15 Abr (Notimex).- Los meridanos parecen no estar dispuestos a que el recuerdo de Pedro Infante se pierda en las nuevas generaciones y con devoción, cariño y esfuerzo han logrado transmitir y mantener el legado del ídolo a 62 años de su muerte.

Este 15 de abril se cumplió un año más del fatídico día en que la aeronave que piloteaba el actor y cantante se desplomara unos minutos después de haber despegado del aeropuerto internacional de Mérida y se estrellara en el sitio que hoy es conocido como la esquina de “La Socorrito”.

Ahí desde muy temprano cientos de personas de reunieron para rendirle homenaje a Pedro Infante, quien falleciera un 15 de abril de 1957.

El homenaje fue encabezado por el gobernador Mauricio Vila Dosal y el alcalde Renán Barrera Concha. También asistió Armando “Torito” Infante Gutiérrez, hijo del extinto actor y cantante.

Cerca de 800 personas asistieron puntuales a la cita en “La Socorrito”, ubicada en el cruce de la calle 87 por 54 del Centro de Mérida, donde hace seis décadas cayera sobre varios predios el avión que piloteaba Pedro Infante.

El presidente del Comité Organizador de los Homenajes a Pedro Infante, Mauricio Canto Hernández, recordó que junto con el llamado “Ídolo de Guamúchil” también fallecieron los vecinos Baltasar Martín Cruz y Ruth Rosell Chan, así como la tripulación que acompañaba al artista, el copiloto Víctor Manuel Vidal y el mecánico Marciano Bautista, hecho que conmocionó a todo México.

“Cabe recordar que el actor y cantante trascendió fronteras y por eso se le recuerda, ya que forma parte de la cultura popular mexicana y se convirtió en el ídolo de México. Si bien nació sinaloense, murió como yucateco, ya que en la ciudad blanca caminó, comió, durmió y hay quienes dicen que hasta amó por última vez”.

“La gente que lo conoció lo recuerda por su carisma, humildad, sencillez y cercanía con los más humildes y por eso aún lo sigue recordando y promueve en sus hijos el cariño por el ídolo”, abundó.

Por su parte, el gobernador Mauricio Vila Dosal declaró que la conmemoración que hacen los yucatecos cada año para recordar el aniversario luctuoso de Pedro Infante “es un ejemplo de que somos una sociedad que mantiene sus tradiciones y costumbres, las cuales se van heredando de generación en generación”.

Por su lado, Infante Gutiérrez expresó su agradecimiento a los yucatecos por mantener vigente la memoria de su padre, y de quienes remarcó el cálido recibimiento que tiene cada vez que visita tierras yucatecas.

Las actividades por el 62 aniversario de la muerte de Pedro Infante iniciaron muy temprano con una misa, posteriormente se depositó una ofrenda floral y después inició un festival artístico en el que estudiantes de danza ejecutaron distintos bailables.

La conmemoración se prolongó hasta la noche en el sitio donde está su estatua monumental, en la calle 62 x 89 a y 91 del Centro Histórico de Mérida, donde también realizaron por la tarde un homenaje a este artista para recordar su fallecimiento.

Las actividades artísticas y culturales arrancaron con una presentación del Moto Club Caminantes del Mayab, que con sus más de 45 miembros hicieron rugir los motores de sus motos y dieron un paseo en memoria del actor, quien también fue un gran aficionado a las motocicletas y solía pasear con su Harley Davison por las calles de Mérida.

Muchos padres disfrazaron a sus hijos, algunos haciendo alusión a personajes que interpretó Pedro en películas como “A Toda Máquina” y otros niños interpretaron las canciones más populares del ídolo.

El evento anual también es aprovechado por los vecinos del monumento, obra del escultor yucateco Humberto Peraza y Ojeda, para ofertar productos que hacen alusión al desaparecido actor y en los que hacen alusión a sus personajes.

También hubo serenatas, mariachis y se montaron obras y exposiciones con fotos y recuerdos de las muchas películas que filmó, así como actividades en el parque que recientemente de edificó en esa zona y que también cuenta con una estatua de tamaño natural de Pedro.

Todo un despliegue de pasión y cariño para un artista que hasta ahora parece inigualable y que a 62 años de su partida, sigue conquistando los corazones de las nuevas generaciones de meridanos.

 

NTX/TAM/GVG