Sugieren a padres equilibrar y ser ejemplo de hijos en uso de Internet

 

(Primera de dos partes) Por Lucía Tadeo Sánchez Hermosillo, 30 Abr (Notimex).- Luego de que la encuesta ENDUTIH 2018 revelara que poco más del 10 por ciento de los usuarios de Internet son niños entre 6 y 11 años de edad, la doctora en Psicoterapia, Nancy Steinberg, reconoció que los padres no lo tienen fácil […]


(Primera de dos partes)

Por Lucía Tadeo Sánchez

Hermosillo, 30 Abr (Notimex).- Luego de que la encuesta ENDUTIH 2018 revelara que poco más del 10 por ciento de los usuarios de Internet son niños entre 6 y 11 años de edad, la doctora en Psicoterapia, Nancy Steinberg, reconoció que los padres no lo tienen fácil en el sentido de buscar un equilibrio del uso de esta tecnología y enseñar con el ejemplo.

La Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2018, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), también reporta que en México hay 74.3 millones de usuarios de este servicio y 18.3 millones de hogares conectados.

Destaca el hecho de que Hermosillo, Mexicali, y Tepic, son las ciudades que se encuentran entre la mayor proporción de usuarios de Internet de México, mientras que han registrado un crecimiento de 2017 a 2018, Tlaxcala, con un 6.5 por ciento, Uruapan con 6.4 y Cuernavaca con 4.5 puntos porcentuales.

En áreas urbanas son Sonora, Baja California, Quintana Roo y Nuevo León, quienes tienen mayor proporción de usuarios, y las más bajas corresponden a Chiapas, Oaxaca, Tlaxcala y Puebla. Mientras que en la zona rural, los más altos son Baja California, Aguascalientes, Morelos y Baja California Sur y los más bajos, Chiapas, Guerrero, Puebla y Ciudad de México.

Ante esta situación, la creadora del “Movimiento Prohibido Castigar”, el cual es el nombre de un libro de su autoría, comentó que es imprescindible no sobrevalorar el servicio o que la conexión sea la recompensa de los menores, sino que se debe supervisar el tiempo que pasan en la red, así como los contenidos a los que tienen acceso.

“Los padres deben de buscar un equilibrio en muchos ámbitos, por ejemplo, entre permitirle hacer sus actividades, pero dentro de un ambiente de seguridad, así como entre la cantidad de tiempo que le permites utilizar la tecnología, y el tiempo que le enseñas a entretenerse de otras formas”, dijo.

Además, entre la cantidad de tiempo que le permites pasar solo y con amigos. Pero es importante que hagan actividades como ir a brincar, correr, cosas por el estilo.

Es esencial, continuó, enseñarles a perder, “porque ya llega un momento que pareciera que la única forma de aprender algo es si lo aprenden para ser el mejor, y esto no siempre puede ser; tienes que aprender que vas a perder, y que otro debe de ganar”.

Otro aspecto que la especialista ha detectado entre los niños es que no han aprendido a posponer gratificación, “lo quieren todo, y lo quieren ya, entonces también encontrar el equilibrio entre aprender a esperar, y aprender cuando debes tener las cosas listas, y rápido”.

“Que aprendan a comunicar desde siempre, enseñarles a tus hijos que tú eres el adulto en que tienen que confiar y que no hay nada que no te puedan decir, pero lo tienes que enseñar desde siempre”, indicó.

Respecto a temas sexuales, expresó que si por error el menor se vio expuesto a una imagen o video, “se le tiene que enseñar a comunicar desde siempre, y ¿cómo se hace eso? Comunicando; para que el niño aprenda a hacerlo, tú tienes que platicarle, por supuesto, filtrando aquel contenido que sea apropiado para la edad, que platique lo que vio para poder contrarrestar el efecto de lo que no debió haber visto”.

Explicó que ella maneja una metodología de disciplina, que es el “Método Prohibido Castigar”, mediante la cual da herramientas a los padres para llegar a una disciplina que llama afectiva y efectiva, es decir que sin necesidad de recurrir al castigo logren realmente una disciplina efectiva con sus hijos y dentro de un ambiente amoroso.

Mencionó que luego de los resultados de la citada encuesta de 2018, comparable con datos de 2015 a 2017, resulta muy interesante porque efectivamente la edad a la que los menores empiezan a utilizar el Internet y todos estos dispositivos es cada vez más temprana.

“Evidentemente no están aquí considerados los niños menores de 6 años, pero yo creo que son de los grandes consumidores. Hay una pequeña tendencia a que las mujeres tienen mayor acceso que los hombres en todas las edades, pero aclaro, cuando lo vemos por porcentaje es muy bajito, pero cuando lo conviertes a población es muy alto porque un punto porcentual son cinco millones de personas”, destacó.

Aunque los menores no deberían tener acceso lo tienen, detalló, ahí es donde los padres tienen que buscar el antídoto para que la información que el niño ya recibió, la pueda procesar y empiece a desarrollar el criterio de cuáles son las cosas a las que debe tener acceso por su edad.

“Porque muchos niños de manera accidental encuentran cosas que están buscando, y a veces no, pero entran al tema, entonces cómo los ayudamos a que decidan si se quedan viendo o no, y eso solo puede ser si te involucras de manera muy directa y muy precisa con los chicos”, subrayó.

En el marco de este Día del Niño, señaló que “creo que el mejor regalo que les podemos dar es permitirles ser niños, esto significa jugar como tal, no solamente a través de las pantallas, pero también sin reglas, echando a volar la imaginación, creando sus propias situaciones, y también interactuando con otros menores de su edad”.

Manifestó que otra de las cosas que suceden con la tecnología es que ya no trepan a los árboles, y además, cuando invitan a alguien a jugar, generalmente es para entretenerse con videojuegos, entonces: ¿se están relacionando con otro niño o con la pantalla?, y además ahora Internet permite que se conecten para jugar cada quien desde su casa.

Steinberg reiteró que si los padres o adultos no intervienen en la socialización del niño, a su desarrollo psicomotor, “les estamos dando en la torre”, porque antes los niños metían goles con las piernas, ahora lo hacen con los pulgares.

Sin embargo, aseveró que la tecnología en sí es extraordinaria, los gráficos son magníficos, la calidad de la música es muy buena, la investigación que está de fondo, esta genial, “pero después de que el niño tiene acceso a todo eso, tú lo pones en un salón de clases y la maestra lo único que trae es el libro de texto, yo creo que los niños no están nada motivamos de aprender así”.

¿A qué edad a mí me parece que debe tener acceso, en donde él sepa lo que está haciendo?

“A mí me parece que sin supervisión no debería ser antes de los ocho años, pero cuando ves las estadísticas y la realidad, no estoy hablando de este estudio mexicano, me refiero a las estadísticas internacionales hay niños de 3 y 4 años que están teniendo acceso sin ningún tipo de supervisión”, reconoció.

Entonces a qué edad, destacó, ya no se puede filtrar porque están siendo bombardeados por esto, la cantidad y el contenido, en la medida que sea posible, sería muy deseable que los padres pudieran controlarlo.

Ahí es donde los padres pueden interceder y escoger qué programas puede ver, los mismo cuál es el juego que quieren jugar “le pones realmente un reloj que le marque el tiempo, o le limitas en niveles que puede ir superando en un juego de competencia”.

Precisó que el contenido evidentemente, los papás tienen que poder filtrarlo. Actualmente, hay disponibles aplicaciones que les permiten controlar el contenido al que tienen acceso sus hijos, pero ellos no solamente tienen acceso a Internet en la casa, sino en el colegio o en casa de amigos.

Detalló que cada uno de los usuarios de este servicio tiene que tomar conciencia de cuánto peso se le está dando a la tecnología en la vida diaria para lograr hacer el cambio, “si tú haces el cambio y tú eres el modelo para tus hijos, el cambio se va a ir dando en tus hijos”.

Entonces los adultos tienen que responder a esta necesidad, ya que sugirió no es correcto bloquearles el acceso a Internet, “pero si tenemos que responder para que el contenido que nosotros les damos, no necesariamente compita, sino tenga su realidad paralela para que el niño realmente lo disfrute”, precisó.

La otra cosa es cuánto tiempo debe de utilizar el niño el Internet, entonces, si tu como mamá (padres en general) lo usas horas enteras, no es que le esté dando permiso al niño, le estás dando el ejemplo de lo que se hace en tu casa, puntualizó.

-Fin de nota

 

NTX/LTS/AEG