Decomisan 63 reptiles de Six Flags por no acreditar su legal procedencia

Uno de los parques de diversiones más importantes del país, ubicado en el sur de la Ciudad de México, y una de las escapadas favoritas de los capitalinos que no salen de la ciudad en periodos vacacionales, como la Semana Santa.

Además de contar con juegos mecánicos y áreas temáticas, Six Flags México cuenta con otros atractivos, como el herpetario en el que se exhiben varias especies de serpientes y otros reptiles con el objetivo de hacer que los visitantes conozcan animales que vivien bajo el mito de ser “agresivos” y peligrosos.

Sin embargo, tener una instalación de este tipo requiere permisos que, al parecer, Six Flags, no poseía.

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), aseguró, en visita de inspección, 63 ejemplares de vida silvestre al Herpetario “Bitis Ecosystem” ubicado dentro del parque de diversiones Six Flags de la Ciudad de México, debido a que no se acreditó la legal procedencia de los animales.

Los ejemplares asegurados son: 12 boas dumeril (Acrantophis dumerili), 2 boas de guyana (Boa constrictor constrictor), 2 boas constrictora (Boa constrictor imperatum), 1 boa esmeralda (Corallus caninus), 1 rana pacman (Ceratophys cranwelli), 1 boa arborícola (Corallus enydris), 1 cocodrilo mexicano (Crocodylus moreletii), 2 boas arcoíris (Epicatres cenchria), y 4 lagartos enchaquirados (Heloderma horridum).

Asimismo, 2 serpientes rey (Lampropeltis getula), 2 serpientes rey negras (Lampropeltis nigritus), 2 culebras real coralillo (Lampropeltis triangulum), 2 pitón carpeta (Morelia spilota), 3 pitón sangre (Python brongersmai), y 3 pitón birmano (Python molorus bivittatus), 1 culebra sorda sureña (Pituophis lineaticollis), 3 pitón bola (Python regius), 2 serpiente del maíz (Pantherophis guttatus) y 5 ejemplares de pitón reticulado (Python reticulatus).

Además de 1 serpiente tigre voladora (Spilotes pullatus), 1 tegú (Tupinambis teguixin), 1 skink de lengua azul (Tiliqua sincoides), 1 varano de garganta negra (Varanus albigularis), 2 varanos del Nilo (Varanus niloticus), 1 varano acuático (Varanus salvator), 1 pitón de woma (Aspidites ramsay), 2 pitón de cabeza negra (Aspidites melanocephalus) y 2 boas de arena de Kenia (Gongylophis colubrinus).

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Durante la diligencia se constató que los 62 ejemplares de reptiles y 01 anfibio carecen de sistema de marcaje; asimismo, cuando se solicitó al visitado exhibiera la documentación con la cual acreditara la legal procedencia de los ejemplares, presentó diversas notas de remisión y facturas emitidas por comercializadoras de fauna silvestre, las cuales no contienen todos los requisitos establecidos por la LGVS y su Reglamento.

Estos requisitos de ley permiten dar trazabilidad a la legal procedencia, pues permiten identificar desde el sitio donde fueron reproducidos los animales y rastrear su aprovechamiento autorizado.

Cabe mencionar que el Herpetario cuenta con el Registro emitido por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) para operar como Predio o Instalación que Maneja Vida Silvestre fuera de su Hábitat Natural (PIMVS); el último informe anual de actividades, incidencias y contingencias; logros con base en los indicadores de éxito; así como el plan de manejo debidamente aprobado por la SEMARNAT.

Los 63 ejemplares de fauna silvestre asegurados quedaron bajo depositaría del PIMVS inspeccionado, el cual se obliga a no moverlos del sitio, durante el transcurso del procedimiento administrativo. Por ello se otorgó el plazo de cinco días hábiles para que el PIMVS presente ante la PROFEPA lo que a su derecho convenga para solventar las presuntas irregularidades.

Es preciso señalar que las especies de Boa constrictor constrictor e imperator, Heloderma horridum, Lampropeltis getula y Lampropeltis triangulum, se encuentran listada bajo la categoría de Amenazada (A) en la NOM-059-SEMARNAT-2010. En tanto que la especie Crocodylus moreletii se encuentran bajo la categoría de Sujeta a Protección especial (Pr).

Este tipo de inspecciones a unidades de producción o de manejo, deben ser vistas como instrumentos de mejora en su administración y operación. Además, de que con estas acciones se contribuye a garantizar el óptimo manejo de las unidades y a la protección de las especies silvestres.