La arquitectura orgánica en la CDMX

 

Casa Nautilus, Conjunto Satélite y Nido Quetzalcóatl, son ejemplos de ese tipo de construcciones que embellecen la ciudad


Una de las corrientes arquitectónicas que ha cobrado fuerza en los últimos años es la orgánica, uno de sus máximos exponentes es el mexicano Javier Senosiain cuyas obras se encuentran en la Ciudad de México.

Las construcciones de Senosiain se han clasificado como orgánicas por la relación de la geografía su entorno, en donde las vistas , orientación y topografía, conviene armónicamente y logran afianzar los lazos culturales.

Su obra es basta, aunque en ocasiones ha sido criticada por considerarla demasiado protagonista, Javier ha señalado que su principal motivación es la convicción por un entorno más amigable.

Las obras, en las que predominan las formas curvas, buscan fundirse y convivir con los elementos presentes en el ambiente, así busca que las construcciones fluyan y sean uno con la naturaleza.

Para Senosiain los espacios curvos son los más armónicos y acogedores, además de adaptables al entorno, otra de las ventajas de estos sitios es que es más sencillo regular la temperatura.

En la Ballena Mexicana, la Casa Flor o el Conjunto Satélite, situadas en la Ciudad de México, el arquitecto colocó una capa de pasto sobre las losas con el fin de aislar los rayos directos del sol, con lo cual las habitaciones se vuelven térmicas, es decir, caliente en invierto y frescas en verano.

No dejes de disfrutar de la diversidad arquitectónica de la capital del país, cuya belleza ha cautivado a los miles de turistas que diariamente se maravillan con obras como las de Javier, que hace de los accidentes topográficos su inspiración y los concierte en sitios integrados a la naturaleza.

¿Qué opinas de este tipo de obras arquitectónicas. Cuál es tu favorita?