Descubren la ‘fábrica’ de fake news de origen ruso

Robert Mueller, fiscal especial para la supervisión de la injerencia rusa en las elecciones de Estados Unidos ha dado una fuerte estocada: destapó la fábrica de fake news implicando a 13 ciudadanos rusos y tres entidades del mismo país por interferir en los comicios electorales del 2016.

El ‘operativo’, denominado Proyecto Lakhta, empleaba a cientos de personas y provocaba una red de intoxicación política en EU.

¿Cómo fue ejecutado?

Robert Mueller señaló que, en algunos casos, a quienes acusa se hicieron pasar por ciudadanos estadounidenses para, desde las redes sociales y foros en páginas web, realizar una ‘guerra de información’ con la finalidad de ‘generar desconfianza hacía los candidatos y el sistema político en general’.

Las empresas a cargo de la ‘operación Lakhta’, Internet Research Agency LLC, Concord Management and Consulting y Concord Catering, estaban ubicadas en San Petesburgo y operaban tanto en Rusia como en otro países y operaban con financiación de ‘millones de dólares’, de acuerdo con el fiscal.

También se describió que había ‘cientos de personas’ disponibles para sus operaciones online entre las que figuraban especialistas en la creación de personalidades ficticias que servían para ‘sembrar’ mensajes sin ser descubiertos.

Para no dejar huella, la maquinaría rusa operó desde computadoras de EU y desde ahí, detalla el FBI, es que creaban cientos de perfiles en redes sociales como Twitter, Instagram y Facebook para aparentar ser ciudadanos norteamericanos; su tarea era apoyar o censurar a candidatos y crear comunidades en páginas web para compartir esos contenidos con ciudadanos no implicados, que buscaban documentarse para votar.

Otro método usado fue el reclutamientos de ciudadanos de EU para desarrollar actividades políticas, como participación en protestas. El FBI asegura que éstos no tenían conocimiento de que estaban tratando con rusos. También explicaron que tomaban acciones contrarias, por ejemplo, después de las elecciones, convocaron a manifestaciones a favor y en contra con tal de no apoyar a un candidato como tal, sino generar malestar y manipular la opinión.

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Inicialmente, Mueller comenzó toda la investigación para verificar que el presidente Trump o su equipo electoral estuvieran coordinados con Rusia para demeritar a Clinton durante el proceso electoral de EU. Ahora la investigación se ha ampliado a los estados financieros de Trump y sus allegados.

Aunque el descubrimiento de la ‘fábrica de fake news’ no demuestra si alguien en EU contrató a los rusos para favorecer o perjudicar a alguien, sí comprueba que la injerencia rusa es real y que en internet, no todo es real.

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