Guatemala emprende reto contra la desnutrición

 

El estado patológico afecta a más del 50% de los infantes del país


El gobierno de Guatemala enfrentará en 2017 el reto de reducir de manera significativa la desnutrición que afecta a uno de cada dos menores de cinco años de edad, una de las tasas más elevadas del mundo.

El gobierno del presidente Jimmy Morales informó que pondrá en marcha, el próximo año, una empresa que fue bandera de la administración anterior bajo un ambicioso programa denominado Pacto Hambre Cero.

El objetivo del programa —uno de los tres ejes de gobierno del régimen pasado— de disminuir en 10 por ciento el índice de desnutrición infantil no se alcanzó, pese a la cantidad de recursos invertidos.

Según datos oficiales, la desnutrición en Guatemala afecta a más de 50 por ciento de los niños de cero a cinco años de edad, lo cual representa uno de los índices más elevados a nivel mundial.

La Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan), dependiente de la Presidencia, indicó que entre enero y noviembre pasados se reportaron 111 decesos de niños por desnutrición aguda.

No obstante, la cifra representó una baja de alrededor del 15 por ciento respecto a los 131 fallecimientos de menores registrados en el mismo periodo de 2015, indicó el subsecretario técnico de la Sesan, Rafael Salinas.

Alertó que las cifras de decesos y afectados por desnutrición se ubicarían en “niveles dramáticos”, si no se aplican las estrategias de la Sesan basadas en una ley que entró en vigencia en 2005.

Señaló que las acciones se dirigen de manera prioritaria a atender la desnutrición aguda, la cual “representa una causa de muerte directa en los niños”.

Sin embargo, “el otro tema fundamental de atención corresponde a la desnutrición crónica, vinculada con casos de niños de baja talla y que en los primeros dos años de vida no tienen un desarrollo ‘normal’ cerebral y afecta a la persona el resto de su vida”, apuntó.

El funcionario detalló que en 2017 se profundizará en las acciones aplicadas en el primer año del actual gobierno, basadas en una estrategia de prevención a la desnutrición crónica que abarca cuatro programas.

Los programas se refieren a los servicios primarios de atención en salud, cuyo eje principal es la Ventana de los Mil Días, que incluye programas de vacunación, de atención médica, suplementos alimenticios y, sobre todo, la lactancia materna, además de promover el lavado de manos para evitar enfermedades, y la creación de infraestructura de agua y saneamiento.

El subsecretario de la Sesan destacó que las acciones se impulsarán especialmente en cuatro departamentos: Huehuetenango, Quiché, Alta Verapaz y Chiquimula, que presentan mayor densidad poblacional y de niños menores de dos años.