Italia arranca el año presidiendo el G-7

Italia inicia 2017 como presidente en turno del Grupo de los Siete (G-7) países más desarrollados y miembro temporal del Consejo de Seguridad de la ONU, pero también con la incógnita sobre la duración del nuevo gobierno de Paolo Gentiloni.

“Será más fuerte nuestra voz a favor del desarrollo sostenible, la paz y el compromiso global sobre los inmigrantes”, manifestó Gentiloni a través de Twitter, en relación al ingreso de Italia en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (ONU) a partir del 1 de enero.

Según Pier Ferdinando Casini, presidente de la Comisión de Exteriores del Senado, Italia deberá usar ese asiento para poner en la mesa de discusión temas que considera estratégicos, en primer lugar la situación en el Mediterráneo.

“Será necesario afrontar la estabilización de Libia resolviendo las cuestiones vinculadas tanto a nivel europeo (ante los desacuerdos de Francia e Italia), como la relación en el papel de los países del Golfo y de Turquía, pues lo que está claro es que en Libia se combate una guerra por encargo”, indicó Casini.

Según el legislador, la única vía será la de alcanzar acuerdos entre los países europeos y los de la parte sur del Mediterráneo para poder manejar la crisis de los migrantes y acelerar las inversiones europeas en las naciones de origen de los flujos migratorios.

De acuerdo con expertos, tanto el escaño en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, como la presidencia en turno del G-7 servirán a Italia para hacerse oír en Bruselas, Bélgica, y relanzar la construcción europea tras la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE).

Una cita para discutir sobre el nuevo escenario tendrá lugar el 25 de marzo próximo, cuando Roma será sede de una cumbre extraordinaria con motivo de los 60 años de la firma de los tratados que crearon la Comunidad Europea.

Paralelamente, iniciarán las reuniones del G-7 organizadas por la Presidencia italiana, que abarcarán temas como economía, cultura, medio ambiente, asuntos exteriores, industria, sanidad, ciencia, empleo y agricultura.

La cumbre del G-7 fue agendada para el 26 y 27 de mayo en Taormina, Sicilia, cuando se espera que por iniciativa italiana se discuta, entre otros temas, sobre la relación con Rusia, excluida del Grupo de los Ocho por su anexión de Crimea en 2014.

Se espera que para esa fecha Gentiloni se mantenga al frente del Ejecutivo, que asumió formalmente el 12 de diciembre pasado.