El exlegislador oficialista Mario Abdo Benítez juró el miércoles como nuevo presidente de Paraguay, un país con un comportamiento económico positivo por encima de sus vecinos sudamericanos.
Hijo de quien fuera durante 25 años el secretario privado del dictador Alfredo Stroessner (1954-1989), Abdo Benítez asumió el Ejecutivo con un llamado a mirar hacia el futuro y dejar atrás las divisiones en un momento en que su Partido Colorado enfrenta falta de acuerdos entre algunos grupos internos.
Abdo Benítez sustituye en el poder a Horacio Cartes, también del Partido Colorado, quien tras entregar la banda presidencial se retiró junto con algunos de legisladores aliados al ahora exmandatario.
El nuevo mandatario no cuenta con mayoría en la Cámara de Diputados, de 80 miembros, ni en el Senado de 45 integrantes, por lo que tendrá que construir alianzas para gobernar.
Paraguay, un país con tan solo siete millones de habitantes y una economía basada en la producción agrícola y ganadera, es considerado uno de los más corruptos de la región, según la organización no gubernamental Transparencia Internacional.
Abdo Benítez es licenciado en Mercadeo por la Post University de Connecticut. Cuando el exdictador Stroessner fue desalojado del poder, él se encontraba cursando sus estudios secundarios en Estados Unidos.
México envía felicitaciones
A través de su cuenta de Twitter, el presidente Enrique Peña Nieto felicitó a Mario Abdo al tiempo que le deseó éxito yle refrendó el compromiso de México de seguir estrechando la relación entre ambas naciones.
Felicito a @MaritoAbdo por su investidura como nuevo Presidente de la República del Paraguay. Le deseo el mayor de los éxitos en su gestión y reitero el compromiso de México de seguir estrechando los vínculos de amistad y cooperación entre nuestros países.
— Enrique Peña Nieto (@EPN) August 16, 2018
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