Pedro Sánchez es investido como presidente del gobierno de España

 

El líder socialista obtiene la mayoría simple en la segunda votación


Tras obtener mayoría simple en la segunda votación en el Congreso de los Diputados, Pedro Sánchez Pérez-Castejón, secretario general del PSOE, ha logrado este martes por apenas dos votos de margen sacar adelante su investidura como presidente del Gobierno en su tercer intento personal.

 

Ahora ya tiene luz verde para formar con Unidas Podemos el primer Ejecutivo de coalición del actual periodo democrático. Con su nombramiento, España pretende cerrar una etapa muy inestable de diez meses con un Ejecutivo en funciones, con dos elecciones generales, con cuatro años de Gobiernos en precario, y en la que la política se ha polarizado y las instituciones se han visto sometidas a la mayor tensión en décadas, con el desafío independentista catalán y la irrupción de la extrema derecha de Vox. La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, acudirá esta tarde a comunicar esta votación al rey Felipe VI y Sánchez ultima ahora la composición de su Gabinete.

 

En la votación de este martes en el Congreso se ha calcado prácticamente el resultado de la primera votación del pasado domingo, en la que Pedro Sánchez, de 47 años, no consiguió la mayoría absoluta que exige el artículo 99 de la Constitución. El líder socialista ha obtenido la investidura más ajustada de la democracia con el respaldo de 167 parlamentarios —PSOE (120), Unidas Podemos (35), PNV (6), Más País-Compromís (3), Nueva Canarias (1), BNG (1) y Teruel Existe (1)—. Un total de 165 diputados han emitido un voto negativo —PP (88), Vox (52), Ciudadanos (10), Junts per Catalunya (8), CUP (2), UPN (2), CC (1), Foro Asturias (1) y PRC (1). A la sesión han acudido los 350 diputados, después de que el domingo se registrara la ausencia de Aina Vidal. Esta parlamentaria de En Comú-Podem por Barcelona, aquejada de un cáncer, ha sido una de las imágenes más emotivas de la jornada y ha recibido, emocionada, el aplauso general del hemiciclo y al final un ramo de flores que le han entregado el líder de su formación, Pablo Iglesias, y su pareja y portavoz parlamentaria, Irene Montero.

La investidura de Pedro Sánchez y el Gobierno de coalición de izquierda ha sido posible gracias a la abstención decisiva de Esquerra Republicana de Catalunya (13) y EH Bildu (5). Los independentistas catalanes han hecho valer sus escaños para arrancar al nuevo Gobierno una mesa de negociación bilateral con la Generalitat cuyos detalles no han sido explicados aunque el PSOE insiste en que estarán dentro del marco constitucional. “No se va a romper España” fue la primera frase del discurso con el que Sánchez presentó su programa de gobierno para la investidura, el pasado sábado.

 

Este martes, en lugar de Gabriel Rufián, la portavoz de ERC ha sido premeditadamente Montserrat Bassa, hermana de Dolors Bassa, exconsejera catalana condenada a 12 años de cárcel por sedición y malversación, que, movida por el dolor familiar, pero desde el estrado más solemne de la política española, ha calificado a los diputados socialistas de “verdugos” y “cómplices” de la violencia policial contra los ciudadanos catalanes que acudieron a votar en el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017. “Personalmente me importa un comino la gobernabilidad de España”, ha manifestado con contundencia Bassa, que, no obstante, ha defendido la abstención de su grupo a la investidura como una oportunidad para el “diálogo”. La portavoz socialista, Adriana Lastra, no ha hecho mención alguna a esas palabras en su intervención. Desde las bancadas del PP, Vox y Ciudadanos le han hecho gestos a Sánchez para reprocharle esa alianza.

El líder socialista consigue, por fin, acceder a la Presidencia del Gobierno por primera vez mediante investidura parlamentaria, después de llegar a La Moncloa en junio de 2018 como consecuencia de la moción de censura que destituyó al popular Mariano Rajoy. En febrero de 2019, ERC, inmersa en su lucha con Junts per Catalunya para liderar el independentismo catalán, tumbó los Presupuestos y Sánchez convocó elecciones generales para el 28 de abril. Los comicios tuvieron que repetirse el 10 de noviembre tras la incapacidad del PSOE y Podemos de formar una coalición similar a la que hoy verá la luz.

En el camino, Ciudadanos, que pudo haber formado Gobierno con el PSOE en abril con sus 57 diputados, ha quedado laminado hasta los 10 escaños. Y Vox, contenido en primavera con 24 actas, se ha disparado hasta los 52 asientos. El partido de Santiago Abascal ha impuesto su agenda reaccionaria y ha arrastrado al PP a su versión más extrema, lo que presagia una oposición sin concesiones y una legislatura más allá de la crispación.

En las últimas jornadas, la derecha ha tratado de convencer a diputados socialistas y a otras formaciones como Teruel Existe para que impidieran con su voto el nacimiento del nuevo Gobierno progresista con el apoyo del independentismo. Esas presiones han quedado registradas en algunas intervenciones en el pleno de este martes, tanto de los propios afectados, como el diputado de Teruel Existe Tomás Guitarte, de José María Mazón, del Partido Regionalista de Cantabria, y de la diputada de Coalición Canaria, Ana Oramas, que ha aprovechado su intervención para pedir perdón a su partido por haber cambiado la orientación de su voto contra la investidura de Sánchez sin avisar a su formación y lamentó el mal tono que se ha impuesto estos días de debate en el Congreso.

La retórica inflamada de este fin de semana —y de este mismo martes— tanto en el Congreso como en las redes sociales y los medios de la derecha, no ha logrado, sin embargo, su objetivo de frustrar el nuevo Gobierno en el que se sentarán, por primera vez desde que se aprobó la Constitución de 1978, ministros de un partido a la izquierda del PSOE. Pablo Iglesias será vicepresidente en materia social y en el nuevo Gabinete de Sánchez tendrán también cartera Irene Montero (Igualdad), Yolanda Díaz (Trabajo), Alberto Garzón (Consumo) y Manuel Castells (Universidades). Se espera que los ministros del PSOE se vayan conociendo a lo largo de las próximas horas.