Rescatistas perforarán mañana un túnel para rescatar a bebé de pozo

Madrid, 18 Ene (Notimex).- Los expertos que trabajan desde el domingo en el rescate de un bebé que cayó a un pozo en España esperan perforar mañana sábado un túnel vertical que permita llegar al menor.

Tras descartar la opción de un túnel horizontal, el Colegio de Ingenieros de Caminos en Málaga planea la excavación de un agujero vertical en paralelo al pozo de 25 centímetros de diámetro donde cayó Julen García.

Además de la inestabilidad y la dureza del terreno, la ola de frío también ha alterado los planes de rescate que se habían diseñado en un principio, que eran dos galerías: una horizontal y una vertical.

Ahora los rescatistas intentarán excavar dos túneles verticales, paralelos al de Julen, que tendrán entre 50 y 80 metros de profundidad.

Al mediodía del viernes, llegó a la finca de Totalán la perforadora que se ocupará para esta tarea. La máquina, de 75 toneladas y que era ocupada en unas obras de la vía de circulación M-40 de Madrid, fue trasladada en dos partes. 

Ángel García Vidal, delegado del Colegio de Ingenieros, no descartó la posibilidad que durante las excavaciones se puedan encontrar nueva vetas que impidan las obras de rescate, sin embargo, aseguró que se replanterían los trabajos y se cambiarían las cabezas de perforación.

La empresa sueca Stockholm Precision Tools AB, que apoya el rescate con herramientas de geolocalización y posicionamiento, ha encontrado un hueco de 15 metros bajo el tapón de tierra arenosa a 78 metros de profundidad del pozo.

Los técnicos estiman que en el pozo hay ventilación y que si el niño está en una cavidad podría tener aire, lo que aumenta la esperanza de encontrarlo con vida.

El domingo pasado, el menor identificado como Julen se encontraba de paseo en una finca familiar, ubicada en un monte de Totalán, cuando cayó en un pozo de más de 100 metros de profundidad, sin que los adultos que lo acompañaban pudieran hacer algo para evitarlo o para rescatarlo. 

El pozo, donde está atrapado Julen, fue cavado para la búsqueda de agua subterránea y carecía de permisos por parte de las autoridades locales, así como de señalizaciones.

En el operativo, que es coordinado por la Guardia Civil, participan más 100 personas.

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