Trump afinará discurso para nueva campaña, afirma Conway

 

El equipo republicano fue renovado recientemente


Los cambios que el candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, anunció a su campaña permitirán afinar su mensaje, sin que ello signifique un cambio en su controvertida personalidad, dijo ayer Kellyanne Conway.

“Vamos a afinar el mensaje. Y vamos a asegurarnos de que Donald Trump esté cómodo en su propia piel, que no pierda esa autenticidad que simplemente no se puede comprar y un encuestador no te puede dar”, afirmó Conway, la nueva administradora de la campaña presidencial del candidato republicano.

El miércoles, Trump anunció la incorporación a su campaña de Conway y de Steven Bannon, quien fue nombrado director ejecutivo de la campaña, dos meses después que el millonario despidió de esta misma posición a Corey Lewandowsk, y contrató a Paul Manafort como presidente de campaña.

La llegada de Conway y Bannon fue interpretada en algunos sectores políticos como una reducción efectiva de las responsabilidades e influencia de Manafort, a quien reportes de prensa asociaron con presuntos pagos millonarios de parte del depuesto presidente de Ucrania, Viktor Yanukovych.

Bannon, exinversionista financiero y actual presidente del conservador sitio de noticias Breitbart News, carece de experiencia política; mientras que Conway, quien operaba como asesora de Trump, era conocida hasta ahora como encuestadora.

En entrevista con la televisora CNN este jueves, Conway dijo que la intención de dejar a Trump “en su propia piel” responde al hecho de que eso es lo que esperan los votantes y, por ello, la decisión de buscar cambiar su imagen.

Otra republicana que no votará por el magnate La exsecretaria del Tesoro de Estados Unidos, Rosario Marín, se sumó ayer al grupo de republicanos que se distanciarán de su partido en los próximos comicios presidenciales, al anunciar que votará por la candidata demócrata Hillary Clinton.

Marín, quien fue entre 2002 y 2003 la latina con el cargo más relevante durante el gobierno del expresidente George W. Bush, expresó su desencanto por lo que llamó “el secuestro de mi partido por parte de Donald Trump”.