Alemanes, italianos y chinos van por proyecto del Tren Maya

 

Requerirá una inversión de entre 120 mil y 150 mil millones de pesos


El proyecto del Tren Maya que se planea construir en el suerte del país tendrá una longitud de 900 a mil 500 kilómetros, abarcará los estados de Quintana Roo, Campeche, Chiapas, Yucatán y Tabasco, y requerirá una inversión de entre 120 mil y 150 mil millones de pesos.

Empresas de Italia, China y Alemana han levantado la mano para participar en el desarrollo y construcción de este nuevo medio de transporte, que el gobierno actual afirma que estará listo en cuatro años.

Empresas ferroviarias de Italia se encuentran interesadas en colaborar en el proyecto del Tren Maya, reveló el presidente de la Cámara de Comercio Italiana en México (CCIM), Lorenzo Vianello, quien adelantó que existen algunos consorcios que buscarán acercarse con el nuevo gobierno mexicano.

Así se lo hicieron saber las compañías del sector ferroviario durante la pasada Convención Mundial de las Cámaras Italianas en el Exterior (CCIE), que tuvo lugar en Verona.

“Italia es un player (jugador) importante en ese sector, no digo como los franceses o japoneses, pero estamos muy al nivel”, argumentó antes de la ceremonia de la décima entrega del Premio Italia México.

En tanto, la directora de Desarrollo de Negocios de TÜV Rheinland Rail México, Sandra Álamo, indicó que la empresa alemana está interesada en participar en la certificación de los procesos que le den seguridad a la construcción del Tren Maya.

Entre los proyectos en los que ha colaborado en el país se encuentran la Evaluación Independiente de la Seguridad (ISA) bajo consorcio de supervisión electromecánica para el Tren Interurbano de la Ciudad de México a Toluca, la Asesoría Técnica – Normativa y montaje del Teleférico en la zona de los fuertes para el gobierno de Puebla, así como en la certificación del Mexicable en el Estado de México.

La directiva señaló que, como empresa socialmente responsable, están obligados a participar en las licitaciones de cualquier transporte masivo, sobre todo de pasajeros.

“Somos una empresa independiente y así debe ser mantenida la parte certificadora, no podemos participar con otras empresas, debemos estar del lado del cliente, que en este caso es gobierno, revisando que todos los procesos ocurran con miras a una certificación de seguridad”, apuntó.

En días pasados, Wang Xiaoyuan, funcionario de la cancillería china, afirmó que las empresas de su país tienen buena ventaja, por lo que vislumbró un panorama de cooperación para este proyecto.

Destacó que China cuenta con abundantes recursos financieros y bancos que están dispuestos a apoyar estos proyectos, por lo que el país tiene buena ventaja y con empresas deseosas por participar.

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