“Asumí el post 19-s porque nadie quiso”

 

Hay edificios no contemplados en censo: Becerra


A nueve meses del sismo que sacudió a la Ciudad de México, Ricardo Becerra, excomisionado para la reconstrucción asegura que hay hallazgos de edificios dañados no contemplados en la revisión que se realizó cuando era responsable.

En entrevista para CAPITALMEDIA ratifica que su renuncia se debió a la forma en que Mauricio Toledo, Jorge Romero y Leonel Luna, candidatos a diputado federal, buscaron repartir los recursos.

Asegura que asumió las tareas porque ninguno de los especialistas con los que trabajaron en la gestión de Miguel Ángel Mancera quiso hacerlo.

—¿Qué pasó momentos después del sismo?
Se puede decir que el Gobierno de la Ciudad de México tuvo una actuación desordenada durante la emergencia, pero nadie puede negar que fue una actuación masiva. No se escatimó en atender ese primer shock.
Creo que atinadamente Mancera pensó un decreto para la creación de la figura de coordinación para todas las instancias de la ciudad y pudiera dar jerarquía y orden al proceso.
Luego se nos pidió buscar a un especialista y nadie aceptó dirigir los trabajos de reconstrucción por ello el jefe de Gobierno me dijo: “vas a ser tú”
—¿Fue un error el decreto de Mancera?
En la Ley de Reconstrucción se crea la figura del fondo de la reconstrucción que era diferente al presupuesto, la ley obligaba a la asamblea legislativa a hacer una bolsa aparte que fuera dirigida por la comisión, porque ésta iba a identificar las prioridades y el ciclo cambiante de las necesidades de los damnificados. Por eso nuestra sorpresa fue al enterarnos que los legisladores estaban presupuestado en distintas áreas de las instituciones de la administración pública, el dinero que debería ser parte del fondo considerado en el decreto.
Hoy mismo, y debido a los últimos temblores siguen apareciendo nuevos edificios dañados, nuevos tipos de daño en la infraestructura de la ciudad y por eso no se podía saber, desde diciembre, cuánto se le iba a dar a las diferentes secretarías y agencias.
—¿Cuáles son los nuevos daños que están detectando?
En edificios en la Miguel Hidalgo, donde creo que sí hubo un trabajo muy serio, han surgido nuevos problemas en términos estructurales. Pero ahora los intereses de los damnificados han cambiando. Durante la primera etapa de reconstrucción los afectados querían su dictamen y lo que rogaban al cielo era que dijera reforzamiento no demolición; sin embargo, ahora la comisión tiene un montón de casos que piden lo contrario de lo que pedían al inicio, ahora quieren un dictamen para demolición.
—¿Cuando te refieres a legisladores que decidieron el reparto del presupuesto, a quiénes te refieres?
Hay tres legisladores que tienen una centralidad en el proceso de reconstrucción, en particular Leonel Luna, Mauricio Toledo y Jorge Romero, en ellos cayó la responsabilidad. Ellos tuvieron un papel central en el proyecto de decreto de presupuesto y ellos empezaron a determinar el destino del dinero de los recursos para la reconstrucción.
Nosotros decíamos hay que meter todo ese dinero en un fideicomiso sin ninguna reserva de información y que ese fideicomiso vaya respondiendo a las necesidades que se vienen presentado con los daños del sismo
—¿Fue un reparto como si fuera un botín?
Pues, un reparto… yo no estoy… no juzgo intenciones, pero se estaba actuando de manera normal ante una situación completamente extraordinaria y eso es lo que chocaba con la visión de la comisión.
—¿Ante la emergencia, en realidad crees que fue una actuación “normal”?
Pues digamos normal como todos los años, o sea cada año van los funcionarios y dicen necesitamos tanto…
—Pero ustedes ya les habían dicho que era un fondo extraordinario el que necesitaban ¿no?
No solamente nosotros, la ley se los estaba diciendo
—¿Y qué pasó?
Pues es una gran pregunta. Insisto, no juzgo intenciones, pero pues por eso que ocurrió la renuncia de varios de nosotros porque al final se nos informó que el presupuesto ya estaba determinado y las asignaciones a todas las dependencia; que la labor era reportar lo que los legisladores habían decidido.
—¿Ustedes como comisión tuvieron roces con la asamblea por el manejo del presupuesto?
Sí, desde que empezamos el… yo no digo roces, pero sí había una diferencia bastante cruzada, pero también una conversación buscando soluciones, y eso hay que decirlo, entre la asamblea y la comisión para buscar una conciliación, una conciliación que en nuestro caso no era más que hacer lo que nos mandaba la ley, que era formar un fondo no presupuestar de manera normal un dinero para la reconstrucción.
—¿Qué le dijiste a Mancera?
Más o menos lo que le dije en la carta pública. Yo estaba en una colonia con damnificados unidos cuando me avisan de mi oficina que llego un oficio, yo le informó al jefe de Gobierno que recibí de parte de la asamblea un oficio, una determinación firmada por los legisladores más prominentes y que en esas condiciones no podía seguir, la comisión. Él lo comprendió y así fue.
—¿Hubo una petición para que te quedaras?
Por supuesto que sí, pero era insostenible, ya no para mi, sino para varios de los comisionados. Por fortuna la renuncia tuvo como efecto que se modificara el decreto de diciembre.
—¿Como excomisionado mantienes contacto con los damnificados?
Sí, me tuitean mucho. Bueno de la vinculación, hay que decir primero que lo que paso la ciudad fue una conmoción emocional y diría hasta espiritual. El terremoto no permite hablar de una zona cero, lo que hace más difícil la reconstrucción, estamos hablando de una media luna que va desde la Gustavo A. Madero hasta el ultimo pueblo de Tláhuac y que todavía hoy aparecen damnificados, por lo que creo que el componente de proximidad de los damnificados, que pudo haber perdido un ser querido o su patrimonio, es indispensable, es indispensable ese acercamiento y ese diálogo, pero creo que la reconstrucción sí esta ocurriendo.
—Morena sostiene que la ley de reconstrucción hace que los afectados del sismo pasaran de víctimas a deudores de la banca, ¿cuál es tu opinión?
Creo que la discusión en la asamblea que duro dos meses, y eso también atrasó los trabajos. En la discusión se jugaron dos principios, el de gratuidad universal versus el de ayuda diferenciada conforme al daño sufrido; la ley se decantó en la segunda dirección y creo que es correcto. Sí creo que no hay recursos ilimitados para atender a todos y darles a todos gratis, pero lo que sí deberíamos de hacer con criterios transparentes y claros que el principio de tanto daño y tantas posibilidades te corresponde tanta ayuda porque la afectación esta extendida en toda la ciudad.
Nuestra comisión calculó 110 mil personas más o menos, ya nos lo dirán los censos que debe de entregar el Gobierno de la ciudad.
—¿El proceso electoral contaminó el proceso de reconstrucción de la ciudad?
Pues no quiero pronunciarme sobre eso, pero lo que intento hacer la comisión y creo que también lo hace la actual es actuar fuera de la lógica electoral.
—¿Cómo quedaste con los tres diputados, Leonel Luna, Mauricio Toledo y Jorge Romero?
No saludamos caballerosamente
—¿Antes se saludaban caballerosamente?
Más amigablemente, ahora caballerosamente
—¿De las plataformas políticas actualmente para gobernar la CDMX, consideras que hay alguna que contemple eficientemente la reconstrucción ?
Definitivamente no, yo creo que hay una visión muy superficial de lo que representa el proceso de reconstrucción en todas las plataformas que yo he podido leer para la ciudad.
—¿Después del sismo que lección nos queda?
Hay que decirlo, esta ciudad o se avienta un simulacro en serio, nuevo con responsabilidades muchas más profundas y de más largo plazo el próximo año, o estaremos mandando la señal de que no habremos aprendido nada. Aquí va a volver a temblar y es muy probable que ocurra un sismo más agudo que el que vivimos el pasado 19 de septiembre, sin protocolos de seguridad reforzados, difundidos y sin entrenamiento para ello, esta ciudad va a volver a vivir una desgracia.