¿Cómo identificar la barbacoa de perro y por qué es ilegal en México?

 

Varias personas dicen que la carne de perro es más grasosa que la carne de borrego, aunque no se tiene certeza de esta teoría.


La carne de perro es de sabor intenso, aroma penetrante y textura correosa, por lo que es difícil de masticar, según la Asociación Coreana de Nutrición.

Varias personas dicen que la carne de perro es más grasosa que la carne de borrego, aunque no se tiene certeza de esta teoría.

“Cuando pidan sus tacos, éstos deben ser servidos sobre una servilleta o bien en papel estraza. Si de la carne escurre mucha grasa y la tortilla se queda pegada a la servilleta o al papel estraza, no hay duda: es carne de perro”, explicó un especialista.

Al parecer, la grasa de carne de perro es más pegajosa que la de borrego, pollo, cerdo o res. Al ser animales más pequeños tienen la grasa más concentrada.

Aunque en varios países del mundo se consume carne de perro de forma normal, en México y el Occidente aún es un tabú comer carne de este animal, además muchas personas se preguntan si conlleva algún riesgo sanitario.

Lo primero que debes de saber es que la venta de carne de perro para consumo humano es un delito que se debe denunciar ante la Secretaría de Salud o la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios.

La Norma Oficial Mexicana explica que en México se regula el consumo de “Animal o animales” y la venta de carne de perro no está permitida. Dentro del listado de carnes que, únicamente, estarían avalados para su venta y consumo humanos son: bovinos, ovinos, caprinos, porcinos, aves domésticas, equinos, leporinos o cualquier otra especie silvestre no acuática.

Y aunque de acuerdo a distintos expertos, la carne de perro bien cocinada y manejada de forma higiénica en realidad no hace ningún daño al organismo, en México es ilegal.