Comunidad indígena otomí logra reparación de daños por autopista

 

México, 22 May (Notimex).- Tras 12 años en resistencia, el Consejo Supremo Indígena de la comunidad San Francisco Xochicuautla, Estado de México, logró revertir algunos daños ocasionados a la biodiversidad, sus costumbres y tradiciones por la construcción de la autopista Toluca-Naucalpan, que bloqueó el acceso al bosque. Los habitantes de Xochicuautla señalaron que a fin […]


México, 22 May (Notimex).- Tras 12 años en resistencia, el Consejo Supremo Indígena de la comunidad San Francisco Xochicuautla, Estado de México, logró revertir algunos daños ocasionados a la biodiversidad, sus costumbres y tradiciones por la construcción de la autopista Toluca-Naucalpan, que bloqueó el acceso al bosque.

Los habitantes de Xochicuautla señalaron que a fin de no perder el vínculo con su bosque y las rutas de peregrinación a los lugares que consideran sagrados la empresa constructora y las autoridades mexiquenses aceptaron la propuesta de construir 10 pasos o puentes para mantener la comunicación con ese ecosistema.

Además la población será beneficiaria de un plan de desarrollo integral que contempla siete ejes, como son educción, cultura, salud, deporte, productividad sustentable, forestal y de infraestructura. La autopista tiene 39 kilómetros de longitud y de ellos 2.3 kilómetros pasan por la comunidad.

A decir de los habitantes, los otros pueblos afectados desistieron de solicitar la reparación por las afectaciones por la intimidación, represión y hostigamiento de que fueron víctimas.

“Nos golpearon, nos reprimieron, nos criminalizaron, nos encarcelaron, nos amenazaron; destruyeron nuestros hogares y dividieron a nuestra comunidad, perdimos 12 años preciosos de compartir con nuestras familias, recorrimos todo el país y parte del mundo difundiendo nuestra lucha”, explicaron en conferencia de prensa.

La lucha que emprendieron en defensa de su comunidad llevó a la creación de un grupo multidisciplinario de expertos, incluso el acompañamiento de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y la Organización de las Naciones Unidas.

En entrevista, Venancio, uno de los miembros de la comunidad indígena, indicó que pese a haber conseguido los acuerdos aún se enfrentan otros retos, como la compra de terrenos por parte de empresas que los habitantes temen instalen plantas industriales, así como la pérdida de agua, deforestación y problemas internos.

Por ello, dijo que seguirán en resistencia a fin de preservar sus tradiciones y su cultura, además de la biodiversidad del bosque al que consideran sagrado y fundamental para su cultura.

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NTX/NSG/HCM/MMH/DIV16