Demanda Beatriz Paredes Rangel preservar la lengua materna

La senadora priista, Beatriz Paredes Rangel presentó un punto de acuerdo para solicitar a la Secretaría de Cultura y a la Cámara de Diputados, garantizar la existencia del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas, así como dotarlo de recursos presupuestales necesarios para que se consolide como una institución ejemplar para la preservación y fomento del lenguaje materno de cada región del país.

El Día Mundial de la Lengua Materna, establecido por el Sistema de Naciones Unidas en la Conferencia General de la Unesco de 1999, es muy importante para países como México, cuyas civilizaciones originarias desarrollaron sistemas idiomáticos, destacó la legisladora.

Consideró indispensable que la Secretaría de Educación Pública logre el efectivo cumplimiento de los Derechos en materia de preservación y aprendizaje de las lenguas maternas para la niñez y la juventud mexicana, establecidos en el artículo 3º constitucional.

Ello, a través de la consolidación de un efectivo Programa de Educación Indígena y a través de la dotación suficiente de recursos presupuestales, para el apoyo y formación de los maestros bilingües, la existencia de salarios justos y bien remunerados para los mismos, y fomentar la creación de escuelas bilingües en el país.

Beatriz Paredes también pidió que las Secretarías de Educación Pública y de Cultura, informen del estado que guarda, en su funcionamiento, el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas, así como un informe pertinente del estado que guarda la ejecución del Programa de Educación Indígena.

Advirtió que la diversidad lingüística se ve amenazada y que, en promedio, cada dos semanas, desaparece una lengua, “arrastrando un patrimonio cultural e intelectual que resultan indispensables para la preservación del conocimiento y tradiciones”.

Al menos 43 por ciento, de las seis mil lenguas que se estima se hablan en el mundo, están en peligro de extinción, señaló la legisladora priista.

Por estas razones, Paredes Rangel dijo que es importante que la sociedad mexicana valore las lenguas originarias y, particularmente, los troncos lingüísticos, relevantes en la conformación idiomática, pues tienen un gran impacto en grandes segmentos de la población.