Desconoce GCDMX causa de fallas en alerta sísmica

Pese a que el sistema de alerta sísmica en los altavoces instalados en la Ciudad de México ya tiene tres años, tras el sismo de ayer, como en otros anteriores, falló 12 por ciento de las 12 mil 354 bocinas: es decir, mil 329.

Sobre lo cual, el jefe de Gobierno, José Ramón Amieva, no supo dar detalles ni de las ubicaciones de los equipos que no se escucharon, ni la razón por la cual no emitieron la alerta, como en el resto de la CDMX.

Durante una conferencia ofrecida cinco horas después del movimieno telúrico, Amieva aseguró que se investigará qué ocasionó el desperfecto en los altavoces que, aseguró, están en constante revisión.

“Tenemos que ver cuáles son las causas y si algo falló, corregirlo; y si algo es obsoleto, pues hay que sustituirlo; ese sería el principio”, indicó.

Añadió que podría tratarse tanto del sistema colocado en los postes o del de monitoreo, por lo que se haría una revisión de ambos.

Tampoco pudo informar sobre el número de quejas recibidas por el Gobierno capitalino y sus dependencias a causa de las fallas, ni si los equipos que no se activaron son los mismos de ocasiones anteriores.

Tras dar su informe sobre que no se habían registrado afectaciones en la capital del país, el mandatario local ordenó al director del C5, Idris Rodríguez, informar a los medios de comunicación sobre el tema de las bocinas que en varias colonias se percibieron con el volumen más bajo de lo habitual.

Rodríguez indicó que dos horas después del sismo se identificó que la señal solo llegó a 88 por ciento de los aparatos, es decir a menos de 11 mil bocinas, y por ello durante dos o tres semanas se acudirá a cada uno de los postes de todas las delegaciones para revisar qué fue lo que evitó que se emitiera el sonido, pues aseguró que el sistema de alertamiento del C5 sí funcionó correctamente.

Explicó que hay una calibración sobre los decibeles para dar el aviso y será de los aspectos a corregir.

De lo que si garantizó su correcta operación es del software de alertamiento sismológico pues en cuanto se detectó se pudo anticipar el fenómeno con 51 segundos.

“Las causas son diversas, puede ser que en el momento en que llegó el sonido haya tronado el amplificador y por eso se pudo haber escuchado como un zumbido, eso pudo haber ocurrido”, mencionó.

Añadió que la energía eléctrica, los fusibles o incluso el vandalismo pudieron haber sido los culpables de las afectaciones a los equipos.

Asimismo, reveló que hay 600 bocinas inservibles que no se han cambiado desde 2009, cuando se colocaron, y consideró que la única forma de tener seguridad del funcionamiento es hacer pruebas.

Mismas que, sugirió, deberían realizarse cada dos meses, en vez de esperar a que ocurra un sismo, aunque aclaró que esto lo tendrá que autorizar el Gobierno capitalino.

Por lo que se refiere a los retrasos o ausencia de la alerta en los teléfonos celulares que cuentan con la aplicación, Amieva abundó en que es importante verificar la configuración y tener en cuenta que ésta funciona registrando el dispositivo y no el número telefónico, por lo que en caso de cambiar de equipo es necesario descargar y volver a registrarse.

Por útlimo, el funcionario capitalino puntualizó que en caso de que sean necesarias reparaciones que salgan del presupuesto con el que se cuenta para mantenimiento preventivo, se hará la solicitud.