Diputados aprueban desaparecer las partidas secretas

Diputados aprueban desaparecer las partidas secretas
 

Por unanimidad, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó reformas al artículo 74 de la Carta Magna para eliminar las partidas secretas en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF). De esta forma, se busca que haya transparencia en el manejo de los recursos públicos, informó la presidenta de la Comisión de Puntos […]


Por unanimidad, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó reformas al artículo 74 de la Carta Magna para eliminar las partidas secretas en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).

De esta forma, se busca que haya transparencia en el manejo de los recursos públicos, informó la presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, Miroslava Carrillo, quien indico que en el manejo del presupuesto no debe haber opacidad.

Indicó que con esta reforma se elimina gastos discrecionales, a través de las partidas secretas en el presupuesto, como parte del control y fiscalización del gasto e ingreso público que debe privar en cualquier democracia.

“En materia de presupuesto y gasto público no debe existir secrecía alguna y mucho menos cuando los recursos del erario público sean transferidos a particulares”, señaló la legisladora de Morena.

El diputado del PRI, Fernando Galindo, precisó que la partida secreta fue ideada para hacer frente a gastos contingentes y circunstancias no previstas dentro del Presupuesto de Egresos de la Federación, que permitía un gasto discrecional en el gobierno sin transparencia, generando opacidad y desconfianza.

Sin embargo, señaló que desde hace más de 15 años ha habido una prohibición expresa para utilizar una partida secreta y que esto está debidamente establecido en el artículo cuarto del Presupuesto de Egresos.

“Las denominadas partidas secretas son completamente anacrónicas y contrarias a la realidad política actual, máxime en un contexto en el que nuestro país trata de fortalecer sus instituciones democráticas, el Estado de derecho, así como los mecanismos de rendición de cuentas y transparencia”.

Pablo Gómez, de Morena, señaló que la partida secreta en México durante años fue en aumento, y aumentaba más en los años electorales.

“En 1989, primer año de (Carlos) Salinas, solo la partida secreta al margen de otros gastos que no eran tampoco transparentes, era de 102 millones. La dejó en 190 millones de dólares.

“Además de estas partidas secretas, había muchísimos otros gastos discrecionales en el ramo 23 del Presupuesto. Gigantescas sumas, que llegaron a ser de más de 2 mil millones de dólares, discrecionalmente utilizadas de conformidad con decisiones del presidente de la República”.

De ahí que Gómez Álvarez expreso su beneplácito de que se termine con la partida secreta.