CIUDAD DE MÉXICO, 24 de Abril de 2020.- Con la finalidad de coordinar estrategias y optimizar los recursos para la atención de emergencias o desastres que pudieran provocar los diversos fenómenos naturales que impactan al país, en coexistencia con el COVID-19, se realizó una reunión virtual.
En dicha videoconferencia con 43 integrantes del Comité Nacional de Emergencias (CNE) en el que participan representantes de cada una de las dependencias federales y organizaciones como la Cruz Roja que integran el Sistema Nacional de Protección Civil, el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, hizo un llamado a los entes participantes:
“Al sentido de previsión que estamos obligados atender, a conservar, a construir reservas estratégicas que ante la eventualidad de una emergencia distinta a la que hoy enfrentamos, tengamos capacidad de respuesta a la ciudadanía”.
Durazo Montaño, enfatizó que en el marco de la coyuntura por la “Contingencia Sanitaria” derivada del COVID-19 y ante fenómenos que se presenten en el país como incendios, sismos y ciclones es necesario prever el cumplimiento de las actividades.
“La naturaleza ha sido generosa con nosotros, pero no estamos exentos de que ocurran fenómenos naturales que afecten al país”. Agrego.
En su momento, el titular de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), David León Romero, destacó que la institución realiza acciones en todas las etapas de la gestión integral del riesgo, para hacer frente a los peligros que representan los diversos fenómenos perturbadores que pueden afectar al país.
“Exhortó a que los miembros del Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC) prevean una reserva estratégica de recursos para apoyar a la población en caso de presentarse un desastre o emergencia, coexistiendo paralelamente con la atención que se lleva acabo ante el COVID-19”.
Por su parte Enrique Guevara, titular de Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), indicó que México es un país expuesto a fenómenos cuyos efectos se magnifican por condiciones preexistentes de vulnerabilidad.
“En los últimos 20 años la incidencia anual promedio de los principales fenómenos es de: nueve sismos de magnitud mayor a 5.5; 15 Deslizamientos de laderas; 86 Inundaciones; 51 Ondas cálidas; 6 Ciclones tropicales; 7 Mil 925 Incendios; y 208 eventos socio-organizativos”.
En la Reunión a Distancia, se informó que la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA) continúa alerta ante la incidencia de desastres y emergencias en México para actuar en cuanto se requiera con el “Plan DN-III”, y actualmente el personal militar trabaja en el combate a incendios; ayuda en la instalación del Sistema de Comando de Incidentes y en el Centro de Comando Incidencias.
Además se destacó, que la Secretaría de Marina – Armada de México (SEMAR), trabaja aplicando el “Plan de Continuidad de Operaciones”, y se suma, por supuesto a la jornada de sana distancia, continuando con los apoyos para auxiliar en labores de seguridad en almacenes y hospitales; realizando trabajo de distribución de equipo médico en el territorio nacional ante el contexto del COVID-19.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC); informó que durante el enlace remoto, la dependencia en conjunto con la CNPC y el CENAPRED presentaron la “Guía para la prevención, preparación y la gestión de emergencias en el contexto de COVID-19”, con la finalidad de fortalecer las capacidades del SINAPROC ante la eventualidad de emergencias frente a la pandemia actual.
Según la SSPC, señaló que dicha guía incluye escenarios de riesgo, recomendaciones para las instalaciones de salud y acciones generales y específicas en materia de protección civil ante los fenómenos de mayor probabilidad de impacto en México, mismas que complementan las medidas sanitarias emitidas por la Secretaría de Salud y no sustituyen a programas especiales de protección civil.
La Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, aseguro que el Gobierno de México, impulsa acciones con el único objetivo de salvaguardar la seguridad de las y los mexicanos, hoy haciendo énfasis ante las emergencias y desastres ocasionados por fenómenos naturales, así como la “Contingencia Sanitaria” por el Covid-19, como parte de una estrategia conjunta para generar comunidades resilientes.
