Ellos no nacieron en México, pero fueron servidores públicos

Una reforma a la Ley busca quitar el requisito de “ser ciudadano mexicano por nacimiento”  para dirigir el Fondo de Cultura Económica y así asegurar la llegada del escritor Paco Ignacio Taibo II al frente de este organismo.

En México, para ocupar la dirección de entidades paraestatales como ProMéxico, la Cineteca Nacional y Fondo de Cultura Económica, la condicionante es haber nacido en el país y no ser naturalizado, sin embargo, con la modificación a la legislación únicamente será necesario ser ‘ciudadana o ciudadano mexicano y pleno goce de y ejercicio de sus derechos civiles y políticos”.

Ocuparon cargos sin ser mexicanos: 

• Juan Camilo Mouriño, secretario de Gobernación de Felipe Calderón. 

El fallecido ex funcionario nació en Madrid, España; hijo del empresario Carlos Mouriño Atanes y la mexicana Ángeles Terrazo. A su nacimiento obtuvo las nacionalidades española y mexicana, y a los 18 años de edad, eligió la nacionalidad mexicana, de acuerdo con el Artículo 30.

Mouriño murió el 4 de noviembre de 2008, durante la administración de Calderón, durante el desplome del avión en el que regresaba a la CDMX después de una gira en San Luís Potosí.

• José Córdoba Montoya

Nacido como Joseph Marie y naturalizado mexicano, el economista de ascendencia española nació en Francia. Fue simpatizante del PRI y jefe de la Oficina de Presidencia con el ex presidente Carlos Salinas de Gortari y  representante de México ante el Banco Interamericano de Desarrollo.

• Paco Ignacio Taibo 

El escritor nació en Gijón, España, y llegó a México cuando tenía 10 años luego que su padre Paco Ignacio Taibo I decidieran exiliarse en el país huyendo de la dictadura franquista. Al igual que sus hermanos, el poeta Benito Taibo y el cineasta Carlos Taibo Mahojo, recibieron la nacionalidad mexicana.

Los extranjeros no pueden aspirar a diferentes cargos en México: 

Los mexicanos naturalizados, nacidos en el extranjero, no tienen el derecho político a ser votados, por lo que no pueden aspirar a ningún puesto que se obtenga a través del voto directo, aunque sí pueden ejercer el sufragio durante las elecciones. Tampoco pueden aspirar a puestos como ministro de la Corte o presidente del Banco de México.

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