En silencio, recuerdan a hijos desaparecidos

 

Los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa marcharon por las calles de la ciudad


Como una muestra de solidaridad a las víctimas del terremoto del 19 de septiembre, que ha cobrado la vida de más de 100 personas, los padres de los 43 normalistas desaparecidos salieron a la calle después de tres años de incógnita sobre el paradero de sus hijos; la marcha partió en absoluto silencio del Ángel de la Independencia al Antimonumento a los 43.

“Esta manifestación silenciosa se da en memoria y en solidaridad con las víctimas del sismo del día 7 y del 19; estamos con ellos, su dolor es el nuestro”, detalló Vidulfo Rosales. A propósito del apoyo a lo comunidad damnificada, los 43 padres, decidieron posponer las diversas acciones y marchas previstas en la Ciudad de México.

Los pasos seguros, que los 26 de cada mes toman las calles, se detuvieron a la altura de la Procuraduría General de la República (PGR), instancia que –a decir de Vidulfo Rosale– abogado defensor, lleva un lento avance en las líneas de investigación, pues no son mayores a 30 por ciento, impera la “verdad histórica” que viene desde las más altas esferas, acusó el abogado.

No hubo necesidad de pronunciar palabras para exigir al gobierno la aparición con vida de los alumnos. Esos rostros jóvenes, que Cristiana, madre de Benjamín Ascencio, afirmó, son de los “hijos del pueblo de México”.

Sobre Paseo de la Reforma se unieron habitantes de San Salvador Atenco y la Coalición de Colonias de Tulpetlac. El Antimonumento a los 43 –destino de la marcha– poco a poco estaba más cerca, lo mismo que la lluvia, pasando las siete de la noche, que no dio tregua a los manifestantes que, en reiteradas ocasiones se mostraron agradecidos con la población que hoy sufre.

“Aquellos que siguen buscando a sus hijos, aquellos que no los encuentran y a quienes ya les entregaron el cuerpo, decirles que estamos con ellos, que ese dolor lo hacemos nuestro porque hay personas atrapadas y muertas que en su momento gritaron por esos 43 normalistas”, anunció César uno de los padres.

Frente al número 43 que, según los manifestantes, permanece el recuerdo de la deuda contenida por el Estado con el pueblo mexicano; los padres exigieron que se les dé una respuesta, y anunciaron que no cesarán en su lucha hasta encontrar a los jóvenes.

La lluvia que llegó junto con las exigencias, fue la misma que las cobijo y terminó –por hoy– con lo que inició hace tres años en Iguala, Guerrero.

TABLA Estudiantes de la normal de Ayotzinapa, y maestros agremiados a la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), tomaron la caseta de Tixtla, Guerrero, e incendiaron un autobús de pasajeros.

Con este acto inicia una jornada de mediadas al cumplirse tres años de la desaparición de los 43 estudiantes de esa Normal este 26 de septiembre.