Enfrentamiento en Oaxaca enturbia celebración del Grito de Independencia

Un enfrentamiento entre elementos de la Policía Estatal e integrantes de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), mancharon el buen desarrollo de las fiestas patrias en Oaxaca la noche de este jueves.

Tres horas antes de que se llevara a cabo el tradicional Grito de Independencia, el Centro Histórico fue escenario de un zafarrancho en el que resultaron al menos 20 personas heridas, entre profesores y policías.

Maestros y normalistas, luego de realizar una marcha que salió de la Fuente de las Ocho Regiones, buscaron ingresar al Zócalo para realizar su “Grito alterno”, situación que fue frenada por un contingente de policías que tenían implementado un operativo en las bocacalles del primer cuadro.

Bastaron unos minutos para que la situación se saliera de control y la violencia se hiciera presente, cohetones, piedras, palos, gases lacrimógenos y todo tipo de improperios se hicieron presentes generando una situación que provocó la histeria colectiva en la zona.

Normalistas destruyeron lámparas para que la oscuridad fuera su cómplice, mientras la policía trataba de frenar su avance. Sin embargo, la gran mayoría de maestros buscaron vías alternas para llegar y hacer acto de presencia frente al Palacio de Gobierno.

El gas lanzado por la policía provocó que los negocios ubicados en la zona cerraran sus puertas, con el fin de evitar saqueos o daños a los ciudadanos que en ese momento se encontraban en el lugar y que optaron por retirarse en medio de una histeria colectiva.

Congregados frente a Palacio el numeroso grupo de integrantes de la Sección 22 lanzaron consignas contra el gobierno, exigieron atención a sus demandas y la salida inmediata de Gabino Cué del Gobierno de Oaxaca. Fueron secundados por integrantes del Sindicato de Salud que mantienen también, una protesta en el lugar.

Pese a que momentos después corría la noticia de que el Grito de Independencia se suspendería, minutos antes de las 11 de la noche, las notas musicales de la Banda de Música de la Policía Estatal, con un sonido más fuerte de lo habitual, sonaron como preámbulo del evento.

Fue en punto las 23:00 horas cuando el Gobernador del estado, Gabino Cué Monteagudo, se asomó al balcón para dar el tradicional Grito de Independencia. Su rostro no podía ocultar su enojo. Abajo, el grito de “asesino, asesino” era cada vez más fuerte.

Decenas de ciudadanos que se habían acercado por curiosidad al lugar, tuvieron la primera fila. Familias enteras sin conocer parte de los sucesos anteriores vitorearon al mandarario estatal que mirando hacia el frente realizó la tradición.

“Viva Oaxaca, vivan los héroes que nos dieron patria!, ¡Viva la educación de calidad para las niñas y niños de Oaxaca!, ¡No más actitudes que lastimen a Oaxaca!, ¡Viva México!”, gritó Cué Monteagudo ante los vítores y las rechiflas que se confundieron con el Himno Nacional Mexicano. Los nombres de los héroes pasaron a segundo plano.

Botes, basura y más consignas volaron por los aires luego de las campanadas. Invitados especiales ocuparon los balcones para observar la situación en la plancha del Zócalo, mientras la Sección 22 se acercaba temerariamente a las puertas del Palacio.

Un convoy del Ejército Méxicano que había arribado al lugar, simplemente permaneció ahí observando la situación. Quienes se habían congregado, se trasladaron minutos después frente a la Catedral en la Alameda de León, donde un grupo musical pedía que esa noche fuera de fiesta pese a lo sucedido.

En las entrañas del Palacio, Gabino Cué compartía con sus invitados la ultima festividad del 15 de septiembre como gobernador de Oaxaca, funcionarios de la administración estatal en compañía de sus familias le mostraban afecto; afuera, la Sección 22 continuaba aregando: “Gabino, ya te vas, nosotros aquí seguiremos, te lo dijimos, nosotros somos más”.

Capital Oaxaca/NFA

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