Estrés hídrico, sequía cíclica y aridez permanente, se padece en el país, señala la UAM

Sequía Foto: Internet
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En tierra de riego hay sembradas 5.5 millones de hectáreas, 79% se cubre con riego rodado; 13% con multicompuerta; cinco por ciento con aspersión y el restante con goteo.


México padece estrés hídrico, sequía cíclica y aridez permanente, además de mala administración del recurso, ya que el sector agrícola consume 76%; 14% se destina a uso público urbano, y la industria, incluida la eléctrica, recibe el restante diez por ciento en partes iguales.

A esto se agrega que 25 millones de habitantes tienen agua dos o tres veces a la semana y otros 17 millones carecen del servicio en sus viviendas, por lo que deben acarrearla para satisfacer sus necesidades elementales, afirmó el doctor Óscar Monroy Hermosillo, Profesor Distinguido de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

“A esa situación se suma que 41 por ciento de los mexicanos vive en pobreza y siete por ciento en pobreza extrema, lo que genera un acceso inequitativo, en tanto que 70 por ciento de las aguas concesionadas es controlado por dos por ciento de quienes detentan títulos de concesión”, dijo el académico.

En la conferencia Manejo Sustentable del Agua, Monroy Hermosillo explicó que 70 por ciento del territorio sufre estrés hídrico alto; en condición muy alta, 0.5 por ciento; baja, diez por ciento, y únicamente 19.5 por ciento no lo padece, ya que de los mil 489 millones de millones de metros cúbicos de agua de lluvia, la mitad beneficia al sur-sureste, que representa 30 por ciento de la superficie.

Dijo que de ese volumen, 73 por ciento se evapora; escurrimientos y recarga de acuíferos alcanzan 29 por ciento y 472 mil millones de metros cúbicos al año se catalogan como líquido renovable.

De las 200 millones de hectáreas cuadradas de la superficie del país, 32 millones se destinan a la agricultura, que produce diez millones de toneladas de vegetales, con un Producto Interno Bruto agropecuario que asciende a 764 mil millones de pesos, de los cuales la mitad corresponde a exportaciones.

En tierra de riego hay sembradas 5.5 millones de hectáreas, 79% se cubre con riego rodado; 13% con multicompuerta; cinco por ciento con aspersión y el restante con goteo. Una mitad del agua de riego se concentra en 80 unidades y la otra en 30 mil unidades productivas.

Un sistema rodado de canales por hectárea tiene un costo aproximado de 50 mil pesos, contra 42 mil por aspersión y 52 mil por goteo, mientras que lo generado por hectárea al año asciende a 112 mil pesos al año, dijo el especialista en manejo sustentable del agua.

Por su parte, la ingeniera por la UAM, Lorely Hernández Sánchez, reconoció que si bien por su ubicación geográfica México cuenta con gran variedad de climas y heterogeneidad en la distribución espacial y temporal de las lluvias, el norte recibe la menor cantidad de éstas.
Hernández Sánchez responsable de la Secretaría Técnica de la Subdirección Técnica de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), dijo que a esa diversidad debe sumarse el fenómeno de El Niño, caracterizado por el calentamiento del mar en el Océano Pacífico a lo largo del Ecuador, una anomalía que se presenta cuando los vientos alisios se debilitan y las aguas más profundas afloran en la superficie, apareciendo las primeras alteraciones positivas de temperatura y las aguas de Asia de trasladan hacia América.

Estos episodios provocan disminución de las lluvias de verano y, por tanto, que aparezca la sequía, que entre otros puntos afecta a Sinaloa, una de las áreas agrícolas más importantes del país.