La clase política es contagiada por Covid-19

 

La presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri, es el caso más reciente de contagio entre políticos.


La clase política no ha estado exenta de los contagios por COVID-19. Los casos más recientes son los de la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri y el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue.

A través de su cuenta de Twitter, la diputada priista informó que dio positivo a coronavirus, y aunque no detalló sobre síntomas de la enfermedad, anunció que se aislará.

El gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue, también dio a conocer que dio positivo a COVID-19, y dijo que si bien no presentaba síntomas, se mantendría en aislamiento.

El pasado 15 de diciembre, el gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello, informó que había contraído el virus por lo que se resguardó en casa.

“Les informo que he dado positivo al examen de COVID-19, siguiendo los protocolos de salud, estaré en aislamiento atendiendo mis responsabilidades”, escribió el gobernador en su cuenta de Twitter.

El pasado 2 de noviembre, Claudia Pavlovich también confirmó su resultado positivo a la prueba de SARS-CoV-2. Un día después, la alcaldesa Clara Brugada informó que se aislaría y continuaría con sus labores de gobierno.

Los contagios entre gobernadores

El COVID-19 también ha afectado a otros gobernadores, diputados y senadores, quienes en su mayoría se han recuperado satisfactoriamente.

Omar Fayad, de Hidalgo, fue el primer gobernador en anunciar que había adquirido este virus el pasado 28 de marzo. Horas después de que Fayad reportara ser positivo, el gobernador de Tabasco, Adán Augusto López, también dio a conocer su caso.

El 30 de marzo, Francisco Domínguez Servién, de Quéretaro, también informó a través de un mensaje en Twitter que había dado positivo luego de que presentó síntomas compatibles con la enfermedad.

Héctor Astudillo, gobernador de Guerrero, se convirtió el 9 de junio en el cuarto mandatario en confirmar su contagio.

“Salí positivo, tengo que seguir una serie de recomendaciones médicas, de protocolos, y seguiré dándole atención a todos los asuntos de mi querido estado de Guerrero a través de los mecanismos que hemos utilizado en los últimos días virtualmente”, expresó en un videomensaje transmitido en redes sociales.

El 2 de julio, Francisco Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, confirmó que dio positivo a COVID- 19 y a través de un mensaje en su cuenta de Twitter anunció que atendiendo las recomendaciones de salud trabajaría desde casa.

Otro mandatario estatal que ha dado positivo a COVID, es el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez. En su caso, el mandatario enfermó en dos ocasiones, una el pasado 8 de julio y otra el 8 de diciembre.

El 16 de julio, Carlos Joaquín González, gobernador de Quintana Roo, también anunció su enfermedad y cinco días después, José Rosas Aispuro, gobernador de Durango, hizo lo mismo.

A la lista se sumó el gobernador Silvano Aureoles, de Michoacán, quien informó de su diagnóstico el pasado 10 de septiembre.

Otros mandatarios que han estado en alerta por sospechar estar contagiados han sido el gobernador Javier Corral, de Chihuahua, y Alejandro Murat, de Oaxaca. Sin embargo, tras sospechar haber contraído el SARS-CoV-2 y someterse a las pruebas para detectar este virus, dieron negativo.

Funcionarios del gobierno federal

Los contagios también se han presentado en el gobierno federal. El más reciente caso es el titular de la Secretaría de Marina (Semar), José Rafael Ojeda, quien confirmó que es positivo al virus SARS-CoV-2.

El funcionario que participa todas las mañanas en la reunión de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador, anunció que estaría en aislamiento y continuaría sus labores con el apoyo de las autoridades de la dependencia.

El martes 30 de julio, el subsecretario de Gobernación, Rabindranath Salazar, también informó que dio positivo a coronavirus, por lo que se mantuvo en aislamiento.

“Me encuentro bien en el ánimo de continuar trabajando con fuerza”, escribió en su cuenta de Twitter.

El pasado 25 de junio, Arturo Herrera, secretario de Hacienda y Crédito Público, responsable de las finanzas del país también confirmó haber sido diagnosticado con COVID -9 e informó que seguiría trabajando desde su casa. Su diagnostico se dio a conocer la misma semana en que se había reunió en Palacio Nacional con el presidente Andrés Manuel López Obrador, así como con otros altos funcionarios.

Antes de Arturo Herrera, el del director general del IMSS, Zoé Robledo, informó el domingo 7 de junio que dio positivo a COVID-19.

Otros contagios cercanos al círculo del presidente han sido el de la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval y el del titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Ricardo Sheffield.

El 13 de agosto, la secretaria de Energía, Rocío Nahle también fue diagnosticada con COVID-19 y cinco días después, Víctor Villalobos, secretario de Agricultura, también refirió haber dado positivo a coronavirus.

En tanto, el pasado 10 de septiembre, se informó que Jorge Arganis Díaz Leal, secretario de Comunicaciones y Transportes, dio positivo a COVID tras presentar algunos síntomas.

El pasado 6 de octubre, la jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro Sánchez también confirmó su diagnóstico positivo a COVID-19.

En la Cámara de Diputados además del contagio reportado por Dulce María Sauri se han presentado otros casos más. El 25 de marzo, el grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano confirmó que el diputado Jorge Alcibíades García dio positivo de COVID-19, convirtiéndose así en el primer legislador que contrajo este virus.

A su caso se sumaron dos diputadas de la misma más que se hicieron la prueba de COVID-19 y resultaron positivas.

El sábado 28 de ese mes, MC hizo público el caso de María Libier González. La legisladora intentó ingresar a la sesión del 18 de marzo, pero como parte de los nuevos protocolos se le tomó la temperatura y tenía fiebre, por lo que se le pidió no ingresar al recinto, algo en lo que ella estuvo de acuerdo.

Libier González viajó a Guadalajara, Jalisco, donde vive. Ocho días después seguía con fiebre alta. En un laboratorio privado confirmaron su diagnóstico.

A estos casos se sumó el de la diputada María de Jesús Rosete Sánchez, del PES.

El senador Miguel Ángel Osorio Chong también dio positivo a COVID-19, el pasado 30 de abril.

El 24 de mayo, la diputada federal del PAN,Cecilia Patrón Laviada y el la diputada federal de Morena por el distrito 14 de Veracruz, Carmen Medel Palma, (Morena) también enfermaron de COVID-19.

El martes 30 de junio, Nestora Salgado también informó en sus redes sociales que dio positivo al nuevo coronavirus.La legisladora confirmó que su estado de salud es delicado pero estable y que ya se encuentra recibiendo atención médica especializada.

Las diputadas panitas federales Josefina Salazar Báez y Adriana Dávila, también confirmaron en redes sociales haber sido diagnosticadas con COVID-19.

A ellas se sumó el caso positivo del diputado panista Jorge Luis Preciado , quien este 30 de junio estuvo en la sesión extraordinaria de la Cámara.

Y aunque la mayoría de legisladores se han recuperado de esta enfermedad, el pasado 15 de septiembre, el diputado federal Miguel Acundo González, integrante del Partido Encuentro Social (PES), falleció a causa de coronavirus, siendo el primer diputado que perdió la vida a causa de esta enfermedad.