La deuda histórica con los indígenas aun está lejos de cumplirse; no tienen acceso a la salud, denuncia expertos y legisladores

 

Durante un foro virtual, realizado en el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, que se conmemora el 9 agosto de cada año, y que inició con la interpretación del Himno A Konk'Oy, por parte de la cantante originaria Tulia Sánchez, los participantes lamentaron que este sector continúe sin ser reconocido en sus derechos políticos ni en la toma de decisiones.


A pesar de las reformas constitucionales y las declaraciones internacionales firmadas por México, los derechos de los pueblos indígenas siguen sin cumplirse, y en la actualidad no tienen suficiente acceso a servicios de salud, ni la atención necesaria en la pandemia, denunciaron diputados y expertos.

Durante un foro virtual, realizado en el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, que se conmemora el 9 agosto de cada año, y que inició con la interpretación del Himno A Konk’Oy, por parte de la cantante originaria Tulia Sánchez, los participantes lamentaron que este sector continúe sin ser reconocido en sus derechos políticos ni en la toma de decisiones.

Adelfo Regino Montes, director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), puntualizó que no obstante la reforma constitucional de 2001 sobre comunidades originarias, muchos de los derechos fundamentales no han sido atendidos ni reconocidos, y aunque se les ve como sujetos de interés público, existe el cuestionamiento de que son considerados como objetos de derechos o sujetos pasivos de las políticas públicas.

Dijo que las decisiones que toman en sus poblaciones no tienen validez jurídica, no son reconocidas o no pueden recibir recursos de manera directa. “A veces es más fácil que una asociación civil u otra figura jurídica pueda ser sujeto de asignación de recursos, esto es consecuencia de la limitación constitucional de 2001. Es uno de sus reclamos más importantes”, recalcó.

Irma Pineda, representante de la voz de los pueblos indígenas de Latinoamérica y el Caribe ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), dijo que es necesario impulsar mecanismos de participación social de los pueblos indígenas.

La presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas, la diputada Irma Juan Carlos, señaló que a pesar de existir la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos Indígenas y la Declaración Americana sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, se documentan graves violaciones a estas poblaciones, como la afectación a sus tierras, la falta de consultas, escasa participación política y limitado acceso a la justicia.

Eduardo Zarzosa Sánchez, diputado del PRI, afirmó que no se puede culpar de todo al pasado, porque en la actualidad hay gobiernos populistas con visiones cortas ante esta pandemia, lo que ha provocado muertes, por lo que es necesario preguntarse qué se ha hecho bien y qué está mal.

“No hay claridad de qué se requiere remediar; sólo se ha visto reducción de presupuesto a temas indígenas. Discurso sin recursos, es demagogia”, subrayo el priista mexiquense.

En este sentido, el panista Carlos Alberto Valenzuela González coincidió en que los derechos de este sector han sido violentados, como en el caso de las consultas previas a actividades que puedan afectar su vida interna y comunitaria, la de derecho a la protección a la vida, la falta de consentimiento informado de los servicios de anticoncepción, entre otros. “Se siguen aplicando políticas discriminatorias, racistas e intolerantes contra la comunidad”.

Mientras diputado Raymundo García Gutiérrez, del PRD, dijo que debe articularse el discurso con las acciones, priorizar mecanismos concretos, reconocer que tienen un acceso deficiente y limitado de atención sanitaria, falta de servicios esenciales y otras medidas.

La legisladora del PT, Clementina Marta Dekker Góme, indicó que romper con el paternalismo es una tarea que requiere abordarse de manera coordinada con las mismas comunidades y los tres niveles de gobierno.
El diputado Ariel Rodríguez Vázquez, de Movimiento Ciudadano, pidió no convertir a los indígenas en grupos clientelares ni sujetos de dádivas, sino “entender la diferencia entre enseñarles a estirar la mano y generar un sistema político, económico y social que les permita levantarla”. Agregó que la diversidad cultural que los pueblos originarios representan en América Latina plantea el reto de hacer funcionar la democracia para aprender a dialogar.

Roberto Antonio Rubio Montejo, del PVEM, pidió reconocer a estos pueblos como un sector de la sociedad que aporta a nuestra nación una riqueza invaluable de tradiciones y culturas, mientras Miguel Acundo González, del PES, señaló que la deuda histórica con los pueblos indígenas aún está lejos de saldarse y la violación a sus derechos humanos persiste.