Marchan en defensa de sus prestaciones

 

Exigen reinstalar a compañeros, o ser reconocidos


Su voz retumbaba en el Zócalo capitalino pues eran muchos los sindicatos ahí, pero sin duda uno de los más esperados era la CNTE, quien no sólo marchó por prestaciones laborales y mejores salarios, sino que tras partir del Monumento a la Revolución usó el templete para exigir marcha atrás a la reforma educativa y a otras “que sólo vendieron al país”.

Su demanda principal, dijo Enrique Enríquez, secretario general de la Sección IX de la CDMX, era la reinstalación de 500 compañeros cesados por participar en las movilizaciones o por la evaluación.

A la plaza de la Constitución también llegó la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), integrada por los sindicatos Mexicano de Electricistas (SME) y el de Trabajadores de la UNAM (STUNAM), entre otros.

Su contingente salió del Ángel de la Independencia con la demanda de mayores prestaciones y la promesa de llevar su lucha “más allá de la lucha sindical, porque es justo que los obreros ya no sean explotados”.

Con ello, aseguró el presidente de la UNT, Agustín Rodríguez, buscarán un cambio real a través el ámbito político el 1 de julio, pues dijo que “al secror obrero le debe ir bien el próximo sexenio”, aunque no se ponunciaron por ningún candidato.

Discurso que, aunque en diferente momento, también llevaron intengrantes del extinto Partido Comunista de México, quienes exigieron un cambio en favor de los trabajadores, por una “verdadera justicia laboral”.

Ellos eran casi 200, de entre 25 y 30 años, y se movilizaron de manera pacífica con pancartas y banderas, aunque este partido ya no tiene registro a nivel nacional ni estatal.

Durante la concentración Ángel Chávez, responsable del Partido Comunista de la CDMX, acusó que los sindicatos ya no representan a los trabajadores, por lo que exigieron echar abajo la reforma laboral.

Piden su oportunidad

A la movilización más grande, la de la CNTE, también se sumó el Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar para pedir que al Gobierno Federal ratificar el convenio 189 OIT, con el cual se garantizarán sus derechos laborales.

Además, exigieron al poder legislativo modificar la Ley Federal del Trabajo y la Ley del Seguro Social para garantizar la obligación patronal y corporativa de que las trabajadoras del hogar ingresen al régimen de seguridad social.

Por último, decenas de trabajadoras sexuales de la CDMX demandaron en la zona de la Merced la derogación del artículo 24 fracción VII de la Ley de Cultura Cívica, y que su oficio ya no sea falta administrativa.

Con música de tambores, banderas blancas y consignas como “respeto total al trabajo sexual” y “la calle es de quien la trabaja”, anunciaron el inician simultáneo en Chiapas, Guadalajara, Veracruz y Estado de México, de una serie de movilizaciones y marchas, hasta que les hagan caso.

También denunciaron que varias de sus compañeras han sido amenazadas si no pagan “derecho de piso” a comerciantes y padrotes, a las que dijeron, las autoridades han hecho caso omiso.