El mercado negro de combustibles

 

Los huachicoleros obtienen ganancias anuales estimadas en 20 mil mdp


Gilbert Gil, Xavier Rodríguez y Víctor Mayén

 

El “mercado negro” de los combustibles en México crecerá en los próximos años, advierte el reporte “Situación actual y perspectivas sobre el robo de hidrocarburos en México 2016”, tanto por la complicidad de las fuerzas policiales con el crimen organizado, como de “los tres niveles de gobierno en hechos ilícitos relacionados con el robo de hidrocarburos, de manera directa e indirecta”.

El informe señala que “se espera que los niveles de cooptación de policía aumenten” y refieren un riesgo patente de que “parte de las ganancias que obtienen los cárteles por este ilícito tenga como destino el financiamiento de campañas electorales en los próximos comicios de 2017 y 2018”.

Además, el informe identifica 12 “focos rojos” por el robo de combustibles en el territorio nacional.

El informe refiere que uno de los principales incentivos del “mercado negro” es la complicidad con los elementos de policía, ya que “estos son cooptados por los grupos del crimen organizado a través de sobornos y su rol es el de suministrar protección, facilitar los movimientos regionales de las células criminales y proveerlas de información acerca de los operativos a realizarse que puedan poner en riesgo sus operaciones”.

De 2014 a 2016 se registró la participación comprobada de más de 70 agentes de los tres niveles de gobierno en hechos ilícitos relacionados con el robo de hidrocarburos, de manera directa e indirecta.

Puntos de alerta

En México existen 12 puntos de alerta, es decir, regiones específicas en donde se ha detectado una alta incidencia de tomas clandestinas, tanto zonas de extracción para venta regional o que están enclavadas en zonas de importancia logística estratégica (como nudos carreteros, puertos, zonas fronterizas o corredores industriales) que permiten la movilidad del producto sustraído y su comercialización en lugares distintos del sitio donde se extrajo.

“Uno de los factores que ha incentivado el mercado negro de los combustibles es la complicidad que ha existido de parte de algunos elementos policiales. Estos son cooptados por los grupos del crimen organizado a través de sobornos y su rol es el de suministrar protección, facilitar los movimientos regionales de las células criminales y proveerlas de información acerca de los operativos a realizarse que puedan poner en riesgo sus operaciones”, explica el informe.

Los huachicoleros detenidos en la CDMX

Más violencia y accidentes

Con los cárteles controlando 95% del robo de hidrocarburos, según el estudio, “las disputas violentas entre los cárteles ya consolidados contra los pequeños grupos que también roban energéticos se pueden recrudecer generando alta violencia y asesinatos masivos en pueblos y comunidades en contra de pobladores que colaboren con estas bandas de menor tamaño, principalmente en estados como Puebla, Guanajuato, Tamaulipas, Tabasco, Estado de México y Veracruz”.

Incluso se avizora que incrementará a futuro el número de explosiones y accidentes “así como el número de heridos y pérdidas humanas debido a las técnicas rudimentarias que emplean para perforar las tuberías” por parte de las bandas locales que representan responsables del 5% del robo de combustibles.

Los cálculos de Etellekt Consultores estiman que el número de tomas clandestinas “se eleve en un rango de entre 5 mil 800 a 6 mil tomas clandestinas. Además “ante los constantes incrementos de los precios de las gasolinas en el país, se prevé que el mercado ilegal se consolide en los próximos meses, dado que los cárteles comercializan dichos productos a costos menores que en el mercado formal”.

De acuerdo con solicitudes de información formuladas a Pemex por Etellekt, de 2000 a mayo de 2016, el número de tomas clandestinas ascendió a 20 mil 892, esto equivale a 1.28 tomas por kilómetro en toda la red de ductos de Pemex cuya longitud es superior a los 14 mil kilómetros.

 

 

Las ganancias de los huachicoleros

Los huachicoleros obtienen ganancias anuales estimadas en 20 mil millones de pesos, por la venta ilegal de gasolinas, casi 3 veces más que los 7 mil millones de pesos que la Federación canaliza a las 31 entidades federativas y a la Ciudad de México para combatir la inseguridad.

Alvaro Vizcaíno Zamora, titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), declaró que esta situación es para reflexionar, pues insistió que quienes se dedican al robo de hidrocarburos tienen en ganancias ilícitas, tres veces más dinero que los recursos que reciben todos los estados para fortalecer sus capacidades en materia de combate a la delincuencia.

“El valor del combustible robado a Pemex es de casi 20 mil millones de pesos al año. Permítanme dimensionar cuántos son 20 mil millones de pesos al año; 20 mil millones de pesos sobre tres veces el Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública, tres veces el FASP. El FASP tiene 7 mil millones de pesos y son los recursos que la Federación aporta a las entidades federativas, para fortalecer sus capacidades de seguridad”.

El titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, señaló que si bien no se puede establecer una cifra precisa sobre el monto que implica el robo de hidrocarburos en México; el impacto financiero sí se puede estimar a través de las mediciones al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) con el que se gravan las gasolinas y el diésel.

El funcionario dijo que “huachicol” y “huachicoleros” son palabras nuevas en el país, que hace tres años no existían.

JCS