Por COVID-19 muere líder de Los ‘Zetas’ en Puente Grande

 

Se les relacionaba con la decapitación de 12 personas en el estado de Yucatán.


El reo, de 45 años de edad, no padecía enfermedades que comprometieran su sistema inmune, pero tenía sobrepeso, además de que en el penal había un total de 74 casos confirmados de COVID-19.

Las autoridades de Jalisco informaron la muerte por Covid-19 de Moisés Escamilla “El Gordo May”, líder de zona del cártel de Los Zetas, en el penal de Puente Grande, quien estaba preso por decapitar a 12 personas en Cancún, Quintana Roo.

Escamilla presentó problemas respiratorios y un cuadro sintomático que concuerda con el del COVID-19 desde el 6 de mayo, por lo que fue ingresado al área médica del reclusorio y falleció el 8 de mayo, informó personal médico del Centro Federal de Reinserción Social (Cefereso) número 02 del centro penitenciario de Jalisco.

El 17 de noviembre el juez Tercero de Distrito en Materia Penal de Jalisco dictó auto de formal prisión a los implicados, por los delitos de delincuencia organizada, delitos contra la salud y posesión de armas y cartuchos de uso reservado. Se les relacionaba con la decapitación de 12 personas en el estado de Yucatán.

Las investigaciones federales señalan que dicha célula era responsable de la distribución de cocaína en Cancún, y eran encabezados por “El Gordo May”, quien contaba con una célula de halcones (vigilantes) integrada por policías municipales y civiles que le reportaban los movimientos de las fuerzas federales en la ciudad.

Al momento de la detención, los federales aseguraron fusiles de alto poder, un arma corta, granadas de fragmentación, una camioneta, un vehículo compacto, radios de comunicación, más de 50 mil pesos en efectivo y una pequeña cantidad de mariguana.