Se agrava la crisis del agua en México

Para la organización civil Fondo para la Comunicación y la Educación Ambiental, la crisis del agua es, en gran medida, resultado de un sistema de gestión deficiente que no ha logrado equilibrio entre demanda, disponibilidad y oferta de este recurso vital.

De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua, el mayor desperdicio de agua en México obedece a la ineficiencia en las prácticas de irrigación agrícola, al desarrollo industrial y a los malos hábitos de consumo.

Además, en el abastecimiento de este recurso se registran mermas importantes por fugas en las redes de distribución.

En el caso del agua potable es del 30 al 50% debido a la falta de mantenimiento de las tuberías, el poco control de la presión y la mala calidad de los materiales utilizados. En los domicilios, advierte la ONG en su sitio de Internet, se siguen utilizando muebles de alto consumo y se presentan fugas inadvertidas o no atendidas.

Otros datos duros que retratan el panorama de la crisis del agua en México señalan que en 2012, con una población de 117 millones de habitantes, la disponibilidad natural media por habitante se calculaba en 4 mil 028 metros cúbicos por año. Y se estima que para 2030, con el aumento de la población y el deterioro de los cuerpos de agua, esta cifra descenderá hasta 3 mil 430 metros cúbicos por habitante cada año.

A la par del dato anterior, el consumo per cápita ha ido al alza. En 1955, cada mexicano consumía alrededor de 40 litros al día, y se calcula que en 2012 el consumo aumentó a 280 litros por persona al día.

CÓMO SE ABASTECE MÉXICO DE AGUA

México cuenta con el 0.1% del total de agua dulce disponible a nivel mundial.

Anualmente el país recibe aproximadamente un billón 449 mil 471 millones de metros cúbicos de agua en forma de lluvia. De esta cantidad, se estima que el 72.5% se evapotranspira y regresa a la atmósfera, el 21.2% escurre por ríos o arroyos, y sólo el 6.3% restante se infiltra al subsuelo en forma natural y recarga los acuíferos.

De toda esa cantidad de agua que se queda en la biosfera, se logran extraer 228 mil 721 hm3 y, de este volumen, el 83.5% corresponde a aprovechamientos superficiales, 14.6% a aprovechamientos subterráneos y 1.9% es de origen pluvial.

Es así que en 1950 cada mexicano disponía de 18 mil metros cúbicos al año, pero para 2015 esa cifra se redujo a 3 mil 692 metros cúbicos. Y actualmente 9 millones de mexicanos no cuentan con agua potable.

QUIÉNES CONSUMEN MÁS

Las actividades agropecuarias consumen la mayor cantidad de agua dulce. En México, la agricultura y la ganadería consumen el 76.3%; es decir, tres de cada cuatreo litros. En el mundo, estas actividades consumen en promedio 70%.

Los siguientes grandes consumidores son la industria y la generación de energía. En el país consumen 13% del agua dulce, mientras el promedio mundial es de 22%.

Y el uso doméstico es el menor consumidor, al corresponderle 10% del agua dulce, en tanto que en el mundo el promedio es de 8%.

EL DESPERDICIO

El sector que más agua desperdicia es el que más la consume: el sector agropecuario. Las estimaciones de la Comisión Nacional del Agua mencionan que 57% del agua que consume este sector se pierde por evaporación pero, sobre todo, por infraestructura de riego ineficiente, en mal estado u obsoleta.

Las pérdidas por infiltración y evaporación ascienden a más de 60% del agua almacenada y distribuida para fines agrícolas.

Aunque pareciera contradictorio, la ciudad que más agua desperdicia es la de México y su área metropolitana. Aquí el desperdicio lo causan las fugas de la red hidráulica y, según las autoridades de la Comisión Nacional del Agua, alcanza un 38%.

dgp