Violencia electoral detiene comicios en Tierra Caliente

 

Ciudadanos acusan simulaciones del estado y prevén conflictos


Como parte de la preparación del proceso electoral federal 2018, este día, el Instituto Nacional Electoral (INE) llevará a cabo la aprobación del número y ubicación de casillas básicas y contiguas que serán instaladas el 1 de julio en escuelas, oficinas de gobierno, lugares públicos y domicilios particulares.

Sin embargo, esa planeación no podrá llevarse completamente al cabo, ya que la violencia armada en Guerrero canceló ya la instalación de 10 casillas electorales en cinco comunidades, cuatro de ellas pertenecientes al municipio de San Miguel Totoloapan, en la Tierra Caliente, incluida La Gavia, bastión del grupo criminal “Los Tequileros”, y una más en el municipio de Teloloapan, según informó el vocal ejecutivo del INE en Guerrero, Dagoberto Santos.

La crisis de inseguridad ciudadana a lo largo del territorio nacional se ha exacerbado por la contienda política, ya que 80 aspirantes a puestos de elección popular han sido asesinados desde que dio inicio el periodo electoral el pasado 8 de septiembre.

Con estas ocho decenas de candidatos ejecutados en menos de ocho meses, el pasado 13 de abril, en Sonora, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), inició el despliegue de fuerzas federales, estatales y municipales, así como autoridades ministeriales, para elaborar un mapa de riesgo que prevenga delitos en las elecciones del 1 de julio.

Para Oswaldo Zavala, catedrático de la Universidad de Nueva York en Staten Island y autor del libro “Los cárteles no existen: Narcotráfico y cultura en México”, “siempre que hay una transición política en cualquier parte del territorio (nacional), está precedida de la violencia, o está sucedida de la violencia o las dos cosas”. Afirma que “la política en México ya es un acto de violencia” en sí.

En Michoacán

En el estado donde se cometieron los últimos dos asesinatos de políticos dentro de la misma región terracalentana, el INE instalará 6 mil 60 casillas el día de la elección. Los michoacanos elegirán 24 diputaciones locales de mayoría relativa, 16 diputaciones locales de representación proporcional y 112 ayuntamientos, en medio de asesinatos políticos y diarios combates en la sierra entre bandas del crimen organizado.

Para Gustavo, un michoacano cortador de limón de 36 años, que en los últimos 15 ha tenido una vida política activa tras haber militado en el PRI, en el PRD y actualmente en Morena, los principales factores de riesgo en el proceso electoral son una mezcla de dos ingredientes: “La política y el narcotráfico están amalgamados”, dice con fastidio y conocimiento de causa. Gustavo también se ha perfumado en pólvora y ha olido la muerte de la sierra. Es oriundo de un pueblo cercano a Apatzingán, del que no quiere mencionar el nombre.

Los distritos electorales XXIII, XXII y XXI, correspondientes a las cabeceras Apatzingán, Nueva Italia y Coalcomán, respectivamente, contienen 25 municipios que ya han estallado en violencia armada desde los levantamientos de autodefensas del 2013.

Gustavo asegura que son varias las razones las que podrían provocar un estallido social en Tierra Caliente, la principal radica en las peleas entre todos los partidos políticos: “La tensión no se rompe porque toda la vida política de la región sabe que si se da un paso en falso, la violencia llegaría como torbellino y al final no pasaría absolutamente nada”.

Cuenta que su salidas del PRI y del PRD fueron ya que “tarde o temprano hacen porquerías”, actos de corrupción que, según él, han perpetuado el contexto de violencia social que vive su comunidad: “Es como si hubiera un interés porque las cosas no cambien, por mantener el terror y el caos.

Aquí el tejido social está destruído; no existe. Vivimos en una simulación porque las estructuras del Estado sí existen, pero llenas de corrupción y han infestado a todas las oficinas de gobierno en todo ámbito y nivel. ¿Eso pa qué chingados nos sirve si todo está podrido? Por eso nos urge un cambio. Ya no podemos seguir así.

Es tanta la urgencia, la necesidad y la frustración de pueblos enteros, que eso mismo se ha vuelto una situación de riesgo (en el proceso electoral). Es el tigre del que hablaba el ‘Peje’. Es la gente que ya no permitirá chingaderas” Gustavo habló con tono firme.

El experto Oswaldo Zavala traduce la violencia electoral de la zona: “la muy probable elección de Andrés Manuel López Obrador está alterando demasiadas presunciones sobre una transformación política que seguramente existirá en muchas dimensiones. Muchos de los órdenes configurados en esta ’paz mafiosa’ priista o panista, o una conjunción de ambas, están siendo amenazados. Se ha trastocado ya de manera anticipada el orden político con la posible llegada de López Obrador”.