¿Cómo pacificar a este país?

 

Siguen los gobernadores y alcaldes con la estúpida excusa de que todo es un tema federal


Los tres estudiantes de cine desaparecidos hace más de un mes en Tonalá, fueron torturados, asesinados y sus cuerpos disueltos en ácido, por parte de una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación.

Todos estamos consternados, pero ya nos acostumbramos a estas macabras noticias y al cementerio nacional que todos habitamos.

En qué momento, nos preguntamos, se fue todo al caño; dónde se deshumanizó el país, y cómo es posible que estos malditos nos tengan secuestrados y con un terrible miedo.

Pero el monopolio del terror que sentimos no es exclusivo de los narcotraficantes y rateros, sino de nuestras autoridades omisas, y muchas veces cómplices.

Siguen los gobernadores y alcaldes con la estúpida excusa de que todo es un tema federal. Eso le corresponde al Ejército, a la Marina, ¡pamplinas!

Lo que nos tiene “apanicados” es que nadie sabe cómo el próximo presidente de la República –del partido o coalición que sea–, acabará con esta matazón.

Lo que nos tiene molestos es que ninguno de los aspirantes y suspirantes tiene un plan realista para acabar con la corrupción y la impunidad.

Lo que nos tiene hasta la madre, es que el próximo huésped del gran despacho de Palacio Nacional, no tiene un proyecto serio de cómo disminuir la desigualdad.

Sea quien sea el próximo primer mandatario, no tiene la más remota idea de cómo disminuir la contaminación atmosférica y cómo reinsertar a la sociedad a las personas con alguna discapacidad física. No se diga qué hará para rescatar a los indígenas.

Llámese como se llame, el sucesor del mexiquense Enrique Peña Nieto no tiene un plan para darle chamba a 10 por ciento de los mexicanos que no tienen empleo, ni tampoco sabe cómo aumentar los salarios de los que sí tenemos alguna chamba remunerada.

¿Cómo carajos pacificará al país el próximo primer mandatario?

No lo sé, mientras tanto, somos noticia en todo el mundo: “…fueron torturados, asesinados y sus cuerpos disueltos en ácido”. Así, nuestro sólido país.