Donald Trump y su ingenuidad

Donald Trump hizo campaña diciendo que construiría un muro fronterizo y que México lo pagaría. México por su parte y de manera sistemática sostuvo siempre que no pagaría ningún muro. El 27 de enero, de acuerdo con una transcripción revelada por The Washington Post, los presidentes de ambos países sostuvieron una llamada telefónica en la que el mandatario estadounidense instaba al mexicano a dejar de declarar públicamente que México no pagaría por el muro. Y aquí es donde la cosa se pone interesante porque atendiendo a los argumentos esgrimidos, resulta difícil entender que un magnate como Donald Trump, un auténtico tiburón del sector inmobiliario que se las arregló además para convertirse en el líder de la nación más poderosa del planeta pueda ser tan ingenuo.

De acuerdo con la transcripción Trump le dijo a Peña: No puedes decir que no van a pagar el muro porque eso hace que me vea muy débil y apenas llevo una semana en el cargo. ¡Es vergonzoso para mí! ¡Me pone en una mala posición! ¿Bueno, qué esperaba que dijera el presidente Peña?: Claro, será para nosotros un honor pagar por el muro fronterizo. He girado instrucciones al canciller y al secretario de Hacienda para que cuanto antes determinen si el pago se hará con cheque certificado, con bonos de la Tesorería, con la renta petrolera o ya de plano en efectivo echando mano de las reservas internacionales del Banco de México.

¿Eso esperaba? ¿En qué universo paralelo Donald Trump creyó que México graciosamente aceptaría pagar por un muro cuya principal razón de ser es la de afectar los intereses de miles de mexicanos? Al leer estas transcripciones nos resulta cada vez más comprensible cómo es que Donald Trump se las ha arreglado para que sus primeros seis meses de gobierno sean un absoluto caos.