Economía ante el mundo

 

Los mercados financieros siguen funcionando en forma ordenada


La economía mundial enfrenta diversos riesgos y retos actuales, algunos de los cuales ya están incidiendo en el desempeño de ciertas variables económicas en México.

Los siguientes meses no serán miel sobre hojuelas en temas comerciales y financieros. La volatilidad y el riesgo de un proteccionismo en algunas economías son parte de la adversidad que viene.

Según el Banco Mundial, el crecimiento de la economía mundial se acercará a 3.1 por ciento en 2018 después de un 2017 mejor de lo previsto, dado que continuará la recuperación de la inversión, las manufacturas y el comercio, y las economías en desarrollo exportadoras de productos básicos se beneficiarán con el alza en los precios de dichos productos.

En el caso de México, la principal preocupación se deriva del resultado final de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Además de que Estados Unidos y otros países adopten posturas de mayor proteccionismo que afecten los flujos internacionales de bienes, servicios y factores de producción.

Por ello es que la economía mundial muestra una trayectoria, en general, favorable, aunque no se pueden descartar brotes de nerviosismo en los mercados financieros internacionales como resultado de la normalización de la política monetaria en Estados Unidos, especialmente ante la aprobación del paquete fiscal en ese país, eventos de naturaleza geopolítica u otros factores que afecten el desempeño de la economía mexicana.

Según el  Fondo Monetario Internacional (FMI) estimó el crecimiento de la economía mundial para 2018 y 2019, en 3.9 por ciento, cifra dos décimas mayor respecto a su anterior previsión.

Por el momento, a nivel global las condiciones financieras siguen respaldando el crecimiento económico.

Los mercados financieros siguen funcionando en forma ordenada. Sin embargo, aún faltan meses en los que la economía de EU entrará en dos procesos intensos. El final de la renegociación comercial del TLC y las elecciones intermedias que serán para Trump y su política económica una fuerte prueba.