El león no es como lo pintan

 

Con todo y el apoyo de la marina estadounidense para usar delfines en la localización de especímenes, la pesca se reanuda en abril


Los grupos ambientalistas no paran. Presionan como pueden al Gobierno mexicano para prolongar indefinidamente la veda en el Golfo de California, hogar de la casi extinta vaquita marina. El Comité Internacional de Recuperación (CIRVA), afirmó que el ritmo de disminución de la población del mamífero fue de 90 por ciento en 5 años. Hoy sólo se puede comprobar el avistamiento de 30 ejemplares. Esto, dicen ellos, muestra el fracaso de la Estrategia Integral para la Recuperación de la Vaquita Marina, presentada por la Semarnat en 2015 y que incluía la entrega de apoyos económicos a través de Sedesol para que dos mil familias de pescadores dejaran el mar. Más de 338 millones de pesos y, casi dos años después, se concluye que fue, justo en 2015, cuando la población del cetáceo bajó 50 por ciento de un sólo golpe.

El conteo forzó una auditoría y el escándalo por el posible desvió del recursos dejó sola a Semarnat que no reconoce las cifras de los ambientalistas, pero sí el daño terrible y secuenciado que representa la desaparición de una especie. México perdería también ante la humanidad credibilidad y autoridad para debatir temas ambientales. El Golfo de California, parte de su esencia como Patrimonio Universal de la Humanidad, rango otorgado por la UNESCO en 2005.

Internamente mermamos nuestra capacidad social y gubernamental para asumir retos comunes. Pero el león no es komo lo pintan y con todo y el apoyo de la marina estadounidense para usar delfines en la localización de especímenes, es un hecho que la pesca en el Golfo de California se reanuda en abril, perjudique o no, a la preservación de la vaquita marina.