¿Entrará en recesión EU?

 

Pese a los números que continuamente menciona Donald Trump en sus discursos y tuits, la economía de Estados Unidos podría estarse dirigiendo hacia una recesión


Cada vez que se le presenta la oportunidad, que es todo el tiempo, el presidente gringo alardea de lo bien que va la economía de su país desde que él llego al cargo, en enero de 2017. Curiosamente, el populista demagogo que hoy despacha en la Casa Blanca, basa sus afirmaciones en la información económica proveniente de las mismas fuentes gubernamentales que como candidato descalificaba afirmando, sin poderlo probar nunca, que eran falsas, mentirosas y manipuladas.

Pese a los números que continuamente menciona Donald Trump en sus discursos y tuits, la economía de Estados Unidos podría estarse dirigiendo hacia una recesión, de acuerdo a lo que hace unos días escribió el analista de mercados financieros del diario The New York Times, Matt Philips en un artículo intitulado What’s the Yield Curve? ‘A Powerful Signal of Recessions’ Has Wall Street’s Attention (¿Qué es la curva de rendimiento? “Una poderosa señal de recesiones” que llama la atención de Wall Street).

Phillips escribe que “si estás en el negocio de hacer predicciones económicas, se ha vuelto muy difícil ignorar una señal importante del mercado de bonos. La llamada curva de rendimiento está peligrosamente cercana a predecir una recesión, algo que ya ha hecho antes con sorprendente precisión, y se ha convertido en un gran tema en Wall Street. Términos como curva de rendimiento pueden ser abrumadores si no eres un operador de bonos, pero la mecánica, el impacto práctico y la psicología son bastante simples. Esto es de lo que se trata el alboroto”.

El analista explica que “la curva de rendimiento es básicamente la diferencia entre las tasas de interés de los bonos del gobierno de Estados Unidos a corto plazo, por ejemplo, los bonos del Tesoro a dos años y los bonos del Gobierno a largo plazo, como los bonos del Tesoro a 10 años. Típicamente, cuando una economía parece estar en buen estado de salud, la tasa de los bonos a más largo plazo será mayor que la de los bonos a corto plazo.

Phillips advierte que “la brecha entre las tasas de interés a corto plazo y las tasas a largo plazo se está reduciendo” y aclara que este “aplanamiento por sí solo no significa que Estados Unidos esté condenado a caer en otra recesión. Pero si continúa moviéndose en esta dirección, eventualmente las tasas de interés a largo plazo caerán por debajo de las tasas a corto plazo. Cuando eso sucede, la curva de rendimiento se ‘invierte’ y, lo peor de todo es que cada recesión de los últimos 60 años ha sido precedida por una curva de rendimiento invertida”.

Las ideas de quienes no comparten la idea de que una curva de rendimiento invertida necesariamente augure una recesión son expuestas por Phillips. Sin embargo, éstas van en contra de lo que ha ocurrido en los últimos 60 años.

Estamos advertidos.

El artículo aparece en https://nyti. ms/2IyU9ft