España: crisis de la izquierda beneficia a la derecha

 

La política es la debilidad para inventarse un mundo propio


El dato más revelador de la crisis electoral española radica en el fracaso de la izquierda y el voto del miedo en favor de la derecha: las dos formaciones socialistas perdieron votos y diputados y la derecha del Partido Popular recibió el voto útil.

Respecto a diciembre del 2015, la izquierda socialdemócrata del Partido Socialista Obrero Español quedó en segundo lugar, pero con cinco diputados menos y a 11 puntos del primer lugar, y la izquierda populista Unidos Podemos consolidó el tercer lugar con los mismos diputados, pero perdió un millón de votos; las dos izquierdas suman 156 diputados, veinte menos de la mayoría absoluta de 176.

La izquierda del PSOE es la tradicional, europeísta, aliada militarmente a los EE.UU., con una política social asistencialista. La izquierda de Unidos Podemos se definió populista, marxista, peronista, allendista, dispuesta a sacar a España de la zona euro, con una política fiscal “contra los ricos” y con gasto social a favor de los pobres.

El problema para España fue que su izquierda se dividió: 85 diputados para el PSOE y 71 diputados para Unidos Podemos.

La polarización de la izquierda es reflejo de la crisis económica: el gobierno conservador de Mariano Rajoy implementó una política estabilizadora que liquidó el Estado de bienestar en salud, educación, desempleo y lo logró con el voto favorable de la izquierda del PSOE.

En este escenario nació la nueva izquierda radical y revolucionaria de Unidos Podemos y sus banderas para revertir el costo social de la crisis. Las medidas de ajuste neoliberal de España fueron ordenadas por Bruselas, el país sede de los poderes de la Unión Europea. En este sentido, la pertenencia de España en la UE ha sido al costo de desmantelar su política de bienestar social, aumentar el número de pobres y desempleados y romper el equilibrio proletario por el daño neoliberal a la estructura sindical mediatizada. La prioridad neoliberal dañó a la economía social de España.

En este escenario de crisis social apareció Podemos y su alianza con el ex Partido Comunista Español. El populismo de Unidos Podemos no  ha hecho más que capturar a los descontentos con las medidas neoliberales y de ajuste macroeconómico y convertirlos en masas movilizadas a favor de un gobierno populista: 5 millones (21.1 por ciento) de votos.

La ola populista española de Unidos Podemos está localizada en la ola populista latinoamericana: Brasil, Argentina, Venezuela y México con López Obrador. El posicionamiento de Podemos y de Unidos Podemos ocurrió en dos años y medio, desde su aparición en enero de 2014 para las elecciones del parlamento europeo. En las encuestas previas a las elecciones del pasado domingo, Unidos Podemos había rebasado en expectativa del voto al PSOE.

A Unidos Podemos se le atravesó la crisis de Europa con el Brexit impulsado por la ola populista radical y la del Partido Conservador de Cameron.

El referéndum para la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea ocurrió el jueves 23, tres días antes de las elecciones españolas. El daño económico y social del Brexit atemorizó a los españoles y en las votaciones del domingo Unidos Podemos regresó a su tercer sitio y el PSOE recuperó el segundo lugar.

Por un largo tiempo político Unidos Podemos y su populismo estará estancado en tercer lugar, a menos que el PP y el PSOE profundicen el neoliberalismo y aumenten el número de descontentos y las elecciones detonen la revolución populista.


Política para dummies: La política es la debilidad para inventarse un mundo propio.

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