La corrupción en licitaciones vs AMLO

Vienen ya los días más cercanos a la toma de posesión de Andrés Manuel López Obrador como presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos y en todas las dependencias federales hay efervescencia y prisas por borrar al enemigo número uno del tabasqueño, la corrupción.

Actualmente, en licitaciones, compras y donde participan empresas, los encargados de las compras o los funcionarios asignados para el manejo y otorgamiento de licitaciones, están haciendo lo último y con una ambición que no volverán a practicar pues serán echados muchos y hasta encarcelados Los inspectores del Invea, que encabeza Meyer Klip, andan como charrasca, hacen inspecciones y si un extinguidor tiene un color diferente, la amenaza de clausura aparejada de una conducta incorruptible que termina en auténticas extorsiones, especialmente para los constructores o inmobiliarias, así tengan en orden todos los documentos y licencias.

Lo mismo sucede con los inspectores de reglamentos de las delegaciones que se ponen el antifaz y salen a extorsionar con el pretexto de la clausura por cualquier nimiedad.

No se diga en licitaciones federales, donde un personaje como Claudia Rincón Pérez se dedica desde 1990 a participar en licitaciones, primero con la empresa Soluciones Tecnológicas Especializadas, SA de CV y quien a partir de 2004 hasta la fecha tiene 14 empresas a nombre de familiares cercanos siendo que la misma Claudia Rincón Pérez aparece como administradora.

Andrés Manuel López Obrador llegará asestando severos golpes a la corrupción y ha trascendido que ya hay quienes desde dentro de las propias dependencias pasan información de qué y quiénes son los que se dedican a hincharse de dinero con el otorgamiento de contratos de hasta mil 900 millones de pesos, como uno que dio Pemex a una de las compañías de la llamada mágica maestra de las licitaciones, que son del nivel federal, estatal o municipal puesto que se jacta de tener bien aceitadas sus relaciones al interior de donde salga algún jugoso contrato.

Esta información, que ya fluye a AMLO, se canaliza a quienes estarán al frente de la Contraloría Federal, la Secretaría de la Función Pública y la misma PGR, que será fortalecida con atribuciones y respaldo de investigación y no será de extrañar el desfile de nombres y de indiciados que concluyen en la presente administración.

López Obrador señala que al año se roban 500 mil millones de pesos, muchos de licitaciones arregladas o manipuladas.