La reflexión

La operación final llegará este 2 de junio. Ahí se verá si todo lo hecho, lo aceptado y hasta lo rechazado sirvió de algo y rindió frutos…
Alfredo Albíter Sánchez Publicado el
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El Pico del Pollo |

Por Alfredo Albíter Sánchez 

La reflexión

Estamos a días de llegar a ese famoso periodo de reflexión, esos días convertidos en un oasis donde todos, absolutamente todos y todas las candidatas, se recogen en sus “wars room” y terminan de afinar lo último. Regularmente al llegar a este momento nos detenemos en algo llamado estructura.

El motor de la maquinaria a mover el “Día D”, o sea, en la mera jornada electoral, de esto dependen los números finales.

Atrás quedaron las proyecciones, las planificaciones, las larguísimas reuniones para establecer el qué y cómo, la lluvia de ideas donde los asesores y coordinadores de campaña se vuelven comunicólogos, comunicadores, administradores, consejeros matrimoniales, terapeutas y vuelven a candidatas y candidatos locos con las 349.2 cosas u opciones puestas al frente de su jefa o jefe…

Ya no habrá actos de campaña, cero entrevistas o apariciones en público, menos aún eventos públicos, pero eso no es un impedimento para terminar de cerrar acuerdos, para sentarse -en lo informal- a poner los puntos sobre las “ies” y una vez más, afinar la táctica a seguir. La operación final llegará este 2 de junio. Ahí se verá si todo lo hecho, lo aceptado y hasta lo rechazado sirvió de algo y rindió frutos…

Pero será todo el jueves, viernes y sábado cuando se supone que todos los electores viviremos en el periodo de la reflexión, es decir, de contrastar propuestas, de pensar en serio y a fondo a quién daremos nuestro voto, qué esperamos de ellos y ellas y hasta dónde pensamos nos van a cumplir o si de plano a ojos cerrados pensamos todo lo prometido se hará.

Aquí en estas 72 horas y unos centavos, definiremos -al menos eso se supone- a quién apoyaremos y apenas se instalen las casillas, tipo las 8:00 de la mañana salir en fa a sufragar…

Pero según estudios de escuelas superiores, el periodo sirve de “maldita” la cosa, pues es muy complicado quitar todo el ruido generado por decenas de mensajes, de visitas domiciliarias, de eventos –chiquitos,  grandes- de recomendaciones y claro, del “así como no queriendo”, los activistas continúan con un largo etcétera de situación que nos impide tomar la determinación de por quién o quiénes sufragar. Así las cosas, pero aunque no se logre mucho, un respiro a estas alturas, se agradecerá bastantito.

La rabadilla del Pollo

Pollos en el tejado me dicen, es muy probable que Carlos Ulloa, candidato del partido Morena, obtenga un escaño en la Cámara de Diputados, pues se trata de un aliado cercano de Claudia Sheinbaum, aspirante a la presidencia.

A lo largo de su carrera política, Ulloa ha trabajado junto a Sheinbaum en diversas funciones; recordemos su rol como titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Ciudad de México, en donde logró avances significativos en la regularización de la publicidad exterior y en asegurar la certeza jurídica para hogares y negocios.

En sus recientes apariciones públicas, como el último debate presidencial, Sheinbaum se ha presentado junto a su círculo de confianza, en donde Ulloa figura como un miembro destacado.

Si ambos alcanzan sus objetivos políticos, se espera que el papel de Ulloa en el Congreso sea crucial para promover y aprobar reformas esenciales, como los trabajos para garantizar el acceso a servicios públicos y en desarrollar sistemas de transporte público eficientes y ambientalmente sostenibles a nivel nacional…

Aunque el INEGI diga lo contrario, por hoy, cierro pico. Shalom.

Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx

RGH

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