La UNAM renueva su Rectoría

La UNAM renueva su Rectoría

Kenia López Rabadán*

Este lunes, la Junta de Gobierno de nuestra Máxima Casa de Estudios, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), anunció que el próximo 21 de agosto se emitirá la Convocatoria para nombrar a la persona que asumirá la Rectoría para el periodo 2023-2027, ya que el Dr. Enrique Graue Wiechers, actual Rector, concluirá su periodo en noviembre de este año.

La historia de la UNAM ha marcado los grandes momentos del país. Desde que se le reconoció su autonomía en 1929, hace 94 años, ha tenido 24 rectores y se han fundado 15 facultades y 132 carreras.

Sin duda, la Rectoría de la Universidad más grande de México es una alta responsabilidad, ya que no sólo es el representante legal y el Presidente de su Consejo Universitario, también es quien defiende su autonomía, quien vigila el cumplimiento de su normatividad, quien vela por la conservación del orden libre y responsable, entre otras cuestiones.

Bajo la administración de Graue, la UNAM pasó del lugar 160 al 93 en el ranking de las mejores universidades del mundo, creó 6 nuevas escuelas, 18 licenciaturas, 1 maestría, 2 programas de doctorado y 23 especializaciones. Además, aumentaron su plantilla estudiantil con casi 34 mil alumnos en más de 8 años y sin un incremento real del subsidio federal. Atendieron las denuncias de violencia de género y aunque aún tienen que modificar su reglamento para erradicarla y sancionarla con eficiencia, ha sido un paso en la exigencia de muchas generaciones.

La UNAM ha dado ejemplo en la lucha contra el plagio y actualizar los sistemas de titulación, ello derivado del caso de la ministra Yasmín Esquivel, ya que abusando de su poder, la ministra ha amagado a la Universidad de la Nación para que no resuelvan sobre el plagio que cometió durante su vida universitaria.

Para asumir la Rectoría, se deben reunir ciertos requisitos, el primero de ellos: ser mexicano por nacimiento; tener entre 35 y 70 años de edad; tener grado académico superior al bachiller; tener cuando menos 10 años de servicio docente o de investigación; y haberse distinguido por sus publicaciones o ejecución de obras de reconocido mérito y gozar de estimación general como persona honorable y prudente.

Es fundamental mantener la pluralidad de pensamiento y la libertad de cátedra, ya que estamos ante tiempos donde la educación peligra en nuestro país. Tan sólo en el ciclo escolar 2022-2023, la matrícula escolar de media superior superó los 5 millones de estudiantes y los 4 millones en educación superior, por lo que es fundamental que la máxima casa de estudios siga fortaleciéndose.

Sin duda, en este proceso electivo, se debe defender a la UNAM de quienes pretenden amagarla. No sería la primera vez que desde Palacio Nacional se atenta contra su gobierno interno. Ante esta renovación de su Rectoría, la UNAM necesita conservar su autonomía.

*Senadora / presidenta de la comisión de Derechos Humanos

RGH