Legitimidades contrapuestas

Trump demócratas
 

En Estados Unidos continúa la crisis provocada por el cierre parcial del gobierno generado a raiz del empecinamiento del presidente Donald Trump de obligar al Congreso a aprobarle 5 mil 700 millones de dólares para la construcción de su tan mentado muro fronterizo en los límites de la Unión Americana con México. Este government shutdown […]


En Estados Unidos continúa la crisis provocada por el cierre parcial del gobierno generado a raiz del empecinamiento del presidente Donald Trump de obligar al Congreso a aprobarle 5 mil 700 millones de dólares para la construcción de su tan mentado muro fronterizo en los límites de la Unión Americana con México.

Este government shutdown o cierre del gobierno es ya el más largo de la historia del país, lo cual parece no importarle demasiado al presidente Doanld Trump que por lo menos hasta el momento parece dispuesto a estirar la liga todo lo que se pueda en el pulso que sostiene con la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes.

En cualquier caso es necesario puntualizar que nos enfrentamos a una situación de legitimidades contrapuestas debido a que si bien Donald Trump fue electo con todas las de la ley para ocupar la presidencia de Estados Unidos durante cuatro años y por lo tanto está dentro de sus facultades impulsar la política de desarrollar un sistema de seguridad fronteriza que incluya una barrera física como sería el muro, cierto es también que en las elecciones legislativas de medio término celebradas el pasado 6 de noviembre, los demócratas despojaron a los republicanos de la mayoría en la Cámara de Representantes en Washington y lo hicieron en gran medida oponiéndose al discurso del presidente en el sentido de que resultaba inevitable e inaplazable construir un muro en la frontera con México.

En este sentido, Donald Trump debe hacer una lectura adecuada del sentido del voto ciudadano que se expresó en las últimas elecciones legislativas y adoptar una postura más flexible en lo relacionado con sus pretensiones de financiamiento del muro.

Es verdad, el pueblo lo eligió para ser presidente hasta enero del 2021, pero también es verdad que el mismo pueblo eligió en noviembre del 2018 a un congreso que al menos en su cámara baja está dominado por un partido que no comulga con sus ideas sobre seguridad fronteriza. En Washington es pues tiempo de negociar y de construir soluciones de consenso.