Nicolás Maduro y su semana de frivolidades y excesos

 

Vaya semana la que ha tenido el así llamado presidente de la República Bolivariana de Venezuela. Primero, apareció en un video junto a su esposa Cilia Flores disfrutando de una cena en uno de los restaurantes más lujosos de Estambul, Turquía cuando venía de regreso de una gira que lo llevó a Moscú y a […]


Vaya semana la que ha tenido el así llamado presidente de la República Bolivariana de Venezuela.

Primero, apareció en un video junto a su esposa Cilia Flores disfrutando de una cena en uno de los restaurantes más lujosos de Estambul, Turquía cuando venía de regreso de una gira que lo llevó a Moscú y a Beiging buscando financiamiento para relanzar las operaciones de la empresa Petróleos de Venezuela de la que en no poca medida depende lo que queda de la economía de su país.

El hecho de que las imágenes de la pareja presidencial disfrutando de sendos cortes de carne, finos vinos y habanos haya causado indignación tanto dentro como fuera de Venezuela obedece a que la desatrosa situación económica por la que está atravesando ese país, situación económica que en buena medida puede explicarse por la torpe administración del gobierno de Maduro, ha generado que los venezolanos hayan perdido en promedio once kilos de peso en el último año.

Es obvio que para la imagen del presidente venezolano no resulta positivo que aparezca dándose la gran vida en Estambul mientras que su pueblo está pasando hambre en niveles nunca vistos en el país sudamericano.

Si este incidente no hubiera sido suficiente como para concluir que en términos de imagen pública la semana ha resultado desastrosa para Maduro, un informe recién publicado por la organización Amnistía Internacional sostiene que el régimen de Caracas utiliza tácticas militares para reprimir las protestas populares, tácticas que incluyen por ejemplo prácticas como la tortura y las ejecuciones extrajudiciales.

Todo lo cual resulta inaceptable independientemente del ángulo desde el que se analice. Resulta difícil concebir que la imagen de Nicolás Maduro Moros pueda deteriorarse aún más. Creo que en este aspecto ha tocado fondo. Y sin embargo y por increible que parezca, ahí sigue, en el poder, en la presidencia de Venezuela.

Ver para creer.