Seguridad, proridad de gobiernos

 

Esa prioridad ha sido descuidada, en muchos casos omitida


No hay una sola Constitución local y mucho menos la federal cuyo artículo primero, no señale que la prioridad de quienes llegan a gobernar, deben garantizar la seguridad de sus gobernados.

Sin embargo, la realidad demuestra que esa prioridad ha sido descuidada, en muchos casos omitida, en otros e incluso negociada en gobiernos corruptos que se aliaron con criminales.

Los casos de Tomás Yarrington Ruvalcaba, exgobernador de Tamaulipas y detenido en Italia, de Javier Duarte de Ochoa, exmandatario de Veracruz, preso en Guatemala y los que se irán descubriendo, se corrompieron o pactaron con cárteles para dejarlos trabajar en la entidad, con los resultados que también se vieron en los cuerpos abandonados en diversos lugares de sus estados; en Boca del Río, o los desaparecidos de San Fernando; el asesinato del excomandante de la Judicial Federal y luego presidente Municipal de Miguel Alemán, en Tamaulipas, Raúl Rodríguez conocido como “El Chupón”, recientemente cocido a tiros por la espalda cuando regresaba de estudiar de Derecho para lanzarse como alcalde, por segunda vez.

Lo anterior es sólo una muestra de lo que ahora, sin control de autoridad alguna, la violencia y la impunidad van de la mano, blindadas por corrupción de ministerios públicos y jueces, que les ponen el torniquete que les da entrada y salida.

Las muertes se agolpan en número. Civiles asesinados, periodistas callados a balazos, autoridades masacradas y la prioridad número uno de todo gobierno, pareciera como reloj de arena, diluirse.

Los muertos ya no sólo son entre delincuentes. Ahora se masacran soldados, marinos, policías federales y, más grave aún, familias completas, incluso con niños.

No se trata de rasgarse las vestiduras, esto es muy serio, exigir a las autoridades de los tres niveles de Gobierno y desde luego a los diputados a endurecer las leyes y endurecer su aplicación.

Han asesinado al hermano de Julio César Chávez, al delegado de la Policía Federal de Veracruz, a piquetas de soldados que combaten además del narco, el robo de combustibles a Petróleos Mexicanos.

Los retos políticos

Los retos políticos de todos los partidos son mayúsculos e independientemente de los Frentes Amplios para la Democracia, que más pareciera una forma de no perder los beneficios económicos que reparte el Instituto Nacional Electoral de nuestros impuestos y que alcanzan los 4 mil 500 millones de pesos, que buscar atajar al PRI en las elecciones de 2018.