Senadora petit

 

La senadora con licencia y el fiscal deben su carrera política a Graco Ramírez, con quien además trabajó el esposo de Meza, Ricardo Robledo.


#Dobleces

Israel Mendoza Pérez

@imendozape

La renuncia de la senadora Lucía Meza a Morena es más por un berrinche y evadir su pasado político, cercano al exgobernador Graco Ramírez, y su incómoda amistad con el exfiscal, Uriel Carmona Gándara. Tras no ser elegida para participar en la encuesta interna de Morena para la coordinación de los comités de defensa de la cuatroté, la senadora busca en Cuauhtémoc Blanco al rival político.

Sin embargo, Cuauhtémoc Blanco carece del tamaño para ser un político con influencia al interior de Morena y cerrarle el paso a la senadora. El gobernador de Morelos tiene una fuerza política muy endeble y poco confiable.

Lucía Meza es tibia en sus ataques y se niega a confrontar al dirigente nacional de Morena, Mario delgado o a Alfonso Durazo, presidente del Consejo Nacional de Morena. Además, el tamaño político de la senadora es petit. Tampoco se atreve a señalar a Claudia Sheinbaum, ya que ella además de ser la defensora de la Cuarta Transformación fue quien enfrentó a Uriel Carmona.

En noviembre pasado de 2022, la entonces Jefa de Gobierno de la Ciudad de México acusó a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Morelos, Carmona Gándara, de encubrir el feminicidio de Ariadna Fernanda López, cuyo cuerpo apareció en este territorio.

En su sospechoso protagonismo en ese caso, Uriel Carmona declaró, en su momento, que la joven murió por broncoaspiración derivada de una congestión alcohólica, no obstante, las pruebas periciales, la necropsia, así como videos del día de la muerte de Ariadna, pusieron en entredicho su versión. Incluso, la propia Claudia Sheinbaum acusó la existencia de nexos entre uno de los dos implicados en el feminicidio y el fiscal morelense.

Los señalamientos de Sheinbaum no eran los primeros contra Carmona. Su propio nombramiento fue cuestionado por su cercanía con Graco Ramírez, que hasta le valió el mote de “fiscal carnal”. Luego, a la llegada de Cuauhtémoc Blanco al gobierno de Morelos, en octubre de 2018, fue claro el distanciamiento entre la administración del exfutbolista y la fiscalía.

Su nombre volvió a ser blanco de críticas cuando los “Guacamaya Leaks” destapó vínculos de Carmona Gándara con la delincuencia organizada, a lo que el abogado justificó diciendo que se trataba de acusaciones inventadas por gente cercana a Blanco.

A eso, la amistad entre Uriel Carmona y Lucy Meza es impúdica, y ahora ella lo niega, pero los hechos la callan y la exhiben. Al celebrar el Día del Abogado al tomar la palabra, el fiscal no dudó en externar su apoyo total a Meza asegurando, entre otras situaciones, “yo voy a votar por ella”.

La senadora con licencia y el fiscal deben su carrera política a Graco Ramírez, con quien además trabajó el esposo de Meza, Ricardo Robledo. La senadora con licencia no puede ahora negar su cercanía con el polémico fiscal y su pasado político. Además su cercanía con el exfiscal, la volvió más incómoda y los resultados ya saltaron a la vista. Su rival no es Cuauhtémoc Blanco, pero es más fácil culpar al rival más débil y no contar el trasfondo real de su desplazamiento de Morena, ya que ello es admitir su pasado y amistades.

KJ