Urge orden en el país

 

La situación de la inseguridad se vuelve más complicada


El día de hoy RefleXiono sobre… Cada día que pasa en este país vivimos con más miedo. La situación de la inseguridad día tras día se vuelve más complicada y no sólo porque los índices se han disparado, sino también porque la sicosis que se genera es cada vez más aguda. No sólo se trata de que vivamos inseguros, sino también se trata de cómo nos sentimos ante esta situación. Cada vez pasa, con más frecuencia, que confiamos menos en las instituciones del gobierno y ahora con este famoso nuevo sistema penal acusatorio estamos peor. Lo único que nos queda, de alguna manera, son las instituciones de las Fuerzas Armadas.

Tanto la Marina como el Ejército Mexicano son de las pocas cosas que nos permiten avistar un poco de esperanza de que esta triste situación, por lo menos llegue a estar controlada. Deberíamos aprender de estas instituciones e implementar los programas de promoción en las instituciones civiles. En el caso del Ejército la promoción se realiza por antigüedad y por méritos, lo que asegura que las personas que ocupan mayores cargos, lo hayan ganado con esfuerzo y no sólo por el compadrazgo o la relación de algún “cuate”. Esto, dicho de otra manera, se llama el servicio civil de carrera que en México dista todavía mucho de ser una realidad. En un gran porcentaje de la estructura gubernamental tenemos gente sin capacidad y sin méritos que llega a posiciones delicadas y de las que depende, en ocasiones, la seguridad del país. Es claro que si fuéramos un poco más disciplinados tendríamos mejores resultados en materia de seguridad, pero en un país tan desordenado sólo contamos con la buena voluntad de algunos gobernantes y que cada día es menos.

En una gran mayoría se ha convertido en una “regla” que el que llega se atasca y se han perdido los principios morales, el sentido patriótico y los valores que deberían mover a nuestros gobernantes. Habrá quien se sienta ofendido por lo que aquí se dice, pero en el fondo este tipo de político pervertido sabe que tengo razón. ¿De verdad pueden dormir tranquilos?… ADIÓS…