Candidatos con cara de ¿what? 

Candidatos con cara de ¿what? 
 

Hay mucho que recuperar y el tiempo es breve, más si hay pandemia.


El Pico del Pollo |

Alfredo Albíter Sánchez

No estoy exagerando si digo que así andan las ellas y los ellos que aspiran a obtener un puesto en la elección del 2021. ¿No deberían? Pues efectivamente no, pero la indecisión en los propios partidos los ha obligado a moverse en la clandestinidad, pues saben -como aquellas películas de espías del 007- si son cachados por la autoridad haciendo movimientos que aún no están permitidos, negarán la autorización, es decir, estarán completamente solos…

Bueno eso es ante la autoridad, porque aquí “entre nu” se les impulsa a ir a buscar el voto, amarrar los más que se puedan, hacer campañas caminando en la delgada línea de la Ley e ir ganando terreno al resto de los “aspirinas” que ya le andan dando también, pero no publicidad…

No todo para ahí, claro que no; los auspiciantes se encuentran en el mismo tenor “o sea, sí te apoyo, sí le meto lana a tu campaña, ¿pero mínimo garantízame, no saldrán al rato con que dice mi mamá que siempre ya no, porque nos sacaron el cartón rojo, va? O sea sí te lo garantizo, pero no. Cómo te explico, es que ya nos dijeron que sí, pero como no es muy seguro, pues primero nos piden irnos por nuestra cuenta y después, pues ya le entran, una vez que se avance. Palabras más, palabras menos así han sido los diálogos y las pláticas y va de nuevo. Pues entonces nos esperamos y una vez tengas la bendición, la buena, no la otra “bendi”, pues entonces sí me “caigo cadáver” con el apoyo monetario. ¿Jalas o te pandeas?…

Y de nuevo al viacrucis septembrino de esperar y enfrentar. Has de cuenta como los tesoreros municipales con proveedores. Ya mero, ya mero y así ya van para los dos años y nada más no llega el combustible…El tiempo sigue pasando y por supuesto cada día resultará más difícil convencer al electorado.

Hoy son dos o tres quienes han encontrado la fórmula -bueno se han aventado el desafío-, pero al rato cuando se sumen los cientos de aspirinas el trabajo se multiplicará. Entre más opciones y todas juntas, obvio la dificultad para convencer aumenta. Pero así es esto y luego se preguntan por qué cambian al llegar al poder y desconocen hasta a los de casa. Hay mucho que recuperar y el tiempo es breve, más si hay pandemia.

La rabadilla del Pollo

Pollos en el tejado me dicen que por los alrededores de la escuela Horacio Zúñiga, en la capital mexiquense se conoce la existencia de un negocio cuyo propietario ha encontrado la forma de mantenerlo mañana, tarde y noche perfectamente surtido de artículos de temporada…Tan versátil es que vende desde algodones de dulce, hasta chamarras de ocasión -ándale de esas, puestas en las esquinas del centro histórico-, de todo hay en este sitio pues…Y sabes, esas malditas coincidencias, un día despojan a ambulantes de la mercancía y al otro ya la encuentras en este negocio. Adivinaste, la casa es de un inspector. Ya aportaremos más información. Cierro pico. Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx