Dante, el coqueto

Dante Delgado Rannauro
 

A final de cuentas, Movimiento Ciudadano se ha construido, en más de 20 años de existencia, con disidentes, renegados y malqueridos de otros partidos.


Dobleces |

Por: Israel Mendoza Pérez

@imendozape

La pausa dentro de la alianza PAN, PRI y PRD le abrieron el camino a Dante Delgado Rannauro, histórico dirigente del partido Movimiento Ciudadano, para comenzar a jalar nuevas figuras para su partido rumbo a 2024. El objetivo del partido está en la elección presidencial más que en 2023.

Su más reciente coqueteo político ha sido con la senadora Claudia Ruiz Massieu. Ella ha declarado abiertamente que le interesaría ser candidata presidencial. A raíz de su voto en contra de la extensión de tiempo de las fuerzas armadas en tareas de seguridad interior y su firmeza para aplacar a algunos morenistas como Félix Salgado Macedonio, el también senador y dirigente eterno del partido naranja, la comenzó a ver como una firme posibilidad para abanderar a su partido. Y en ese momento, los mensajes comenzaron de un lado a otro.

Y es que Dante Delgado abrió más la baraja de su juego, ya que descartó la posibilidad de que emece postule al gobernador Samuel García o al alcalde Luis Donaldo Colosio Riojas a la presidencia en 2024. Sin embargo, la priista tiene posibilidades de obtener la candidatura presidencial, ella también ha abonado a que se le tenga consideración en el partido.

En una entrevista, ella analizó el trabajo legislativo y aprovechó para destacar que Dante Delgado es un político de los que cuentan “con mayor visión y sentido estratégico. Además, que Movimiento Ciudadano tiene un papel relevante, fresco, progresista, que ha captado militantes y cuadros de la sociedad civil”.

Los 10 meses que le restan a la dirigencia de Alejandro Moreno son suficientes para comenzar a desfondar al partido tricolor. Dante Delgado tiene bien medido al partido del que formó parte y que le dio la espalda cuando fue defenestrado y encarcelado en el penal de Pacho Viejo. El PRI es un cascarón y quienes lo “habitan”, lo ven como un partido sin futuro mientras la dirigencia no se renueve ni de pie para crear un candidato con posibilidades de cohesionar a las diferentes facciones internas.

La senadora Ruiz Massieu forma parte del bloque opositor a Alejandro Moreno al igual que Beatriz Paredes aunque ella sí fue destapada directamente por Miguel Ánge Osorio Chong. Y la intención de Ruiz Massieu es real, ya que ha declarado: “Sí, me gustaría ser presidenta de México, claro que sí. Hay que trabajar, hay que construir la posibilidad y hay que reconocer cuando se está o no en la circunstancia”.

Dante Delgado se niega a ceder su lugar independiente y ser reclutado por Claudio X. González y sus estrategias de gran alianza opositora. Delgado Rannauro mantendrá su apuesta de ganar territorios a cuentagotas. Unos por estrategia y otros por ser golpes de suerte. La apuesta con Ruiz Massieu es de las grandes, pues mientras mantenga el control del aparato burocrático del partido naranja y sea el encargado de repartir los cargos, no habrá oposición interior para salir en 2024 con un abanderado presidencial sin carrera interna en el partido, pero sí con la anuencia del dueño del partido.

A final de cuentas, Movimiento Ciudadano se ha construido, en más de 20 años de existencia, con disidentes, renegados y malqueridos de otros partidos.