De Oficio Reportero |
POR: RAÚL SÁNCHEZ CARRILLO
La República Mexicana que integra a los 32 estados libres y soberanos adheridos a la Federación, viven casi todos, la peor etapa desde que se fundaron a costa de sangre y fuego; obteniendo dentro de las leyes esa soberanía que por lo menos siete de ellos, ya no gozan.
La pregunta salta a la par de la respuesta. Ya no gozan de su soberanía porque la violencia del crimen organizado ya sustituyó a los conceptos estado libre y soberano. Las críticas a los gobiernos que han antecedido al actual, nunca, jamás dejaron que las cosas fueran avanzando en la descomposición y en la pérdida de la autoridad ni de la obligación Constitucional, de proteger a sus gobernados y es más, a cumplir y hacer cumplir las leyes que de la constitución estatal emanen.
Más de 20 cárteles de la droga se disputan a muerte principalmente los de Jalisco Nueva Generación, con el de Sinaloa, o el Cártel del Golfo con el de los Viagras o como se quieran llamar en cada caso.
La violencia elevada a carnicería, barbarie, asesinatos a mansalva, colgados en los puentes vehiculares de ciudades, a la vista de todos. Las fosas clandestinas, los restos humanos en bolsas de basura, los asesinatos de grupo en fiestas, el sembrar terror en poblaciones como Aguililla, Michoacán o poblados de la sierra de Guerrero, o en Zacatecas, o en Reynosa donde en más de 20 camionetas sicarios fueron disparando a la población que se encontraban en las calles, caminando, trabajando, confiados en que lo que les sucedió, nunca ocurriría.
El panorama en siete entidades ha llevado a la población a armarse, sin saberse el origen de las armas que portan abastecidas con cartuchos. Nadie ha informado de dónde vienen las armas que el pueblo tiene para defenderse de los criminales. Se abren retos, provocaciones y riesgo latente de matanzas. Pero en todo, sale la brillante respuesta de quien es el Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, Andrés Manuel López Obrador, que sin empacho alguno responde al ser cuestionado de que no hay presencia de autoridad que defienda a la población. “Puedo ser responsable, pero no culpable”.
Consultar un diccionario bastaría para derribar la ignorancia de dicha respuesta.
Pero mientras que sigue diciendo que abrazos sí, balazos no o que mejor becarios que sicarios, la multiplicación de ambas figuras es sorprendente. Como sorprende que a la inacción siga el “aunque se burlen de mi”.
Sin tremendismos o adivinos del futuro, lo que se vienen son balaceras entre cárteles y sociedad civil. Entre los de las armas de altísimo calibre y las escopetas 22 de un tiro.
Para quienes matar es común, cotidiano a costa de morir incluso. La ley de la selva, la Tierra de nadie.
Pero a cambio, a la falta de medicamentos para niños con cáncer de los que han muerto más de cinco mil, flamantes estadios para jugar béisbol, el deporte favorito del presidente.
Ah… pero viene la consulta para enjuiciar a por lo menos cinco expresidentes cuando la consulta sería si el gobierno actual está sirviendo al pueblo que le paga y esta haciendo cumplir y hacer cumplir las leyes que de la Constitución emanan . Sería sorprendente la respuesta, respuesta que se tendrá antes de que acabe 2024.
