Navegar en seria tormenta

De Oficio Reportero |

Al decir que no era de gran ciencia gobernar, el presidente Andrés Manuel López Obrador, estaba seguro de que no había en el Radar, nada que se fuera a alterar severamente el panorama del país. Si embargo, el jueves pasado, Culiacán se convirtió en tiempo récord en la tormenta mas seria que había enfrentado la 4T.

 

Los factores que formaron la primera crisis con visos de tragedia en la capital de Sinaloa, Culiacán, fueron imprevistos. Nadie imaginaría que en una torpeza mayúscula del mando de la Guardia Nacional, se ordenaría la aprehensión de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, declarado en prisión perpetua en una cárcel de alta seguridad en territorio norteamericano, a petición del gobierno de los Estados Unidos, aprehensión provisional con fines de extradición de ambos por introducir drogas al mercado de mayor consumo en el mundo.

 

Antes de llegar a este escenario, se dio Aguililla en Michoacán, con 14 presuntos sicarios muertos y un elemento del Ejército que perdió la vida pero que, desde su ametralladora .50 colocada en el frente de un vehículo, alcanzó a rafagear a los agresores. Después vino en las cercanías de Iguala, un nuevo saldo fatal en otro enfrentamiento entre sicarios ahora de Guerreros Unidos y el Ejército. Nadie con dos centímetros de frente, podrá negar que el combate entre autoridades y malandros, es a muerte.

 

Por lo anterior, no se debe dejar de lado, que, pesar de que este, es un gobierno que protege la vida humana, deja en el desamparo a quienes en defensa propia, responden las agresiones.

 

En Culiacán hay mas de 450 elementos de élite, del Ejercito que llegaron a la capital de Sinaloa, el fin de semana y que desde hace mas de 36 horas, ya patrullan las calles de aquella entidad. Van armados con los mas altos calibres.

 

Atrás han quedado los mas intensos momentos de enfrentamiento entre sicarios del Cártel de Sinaloa y Federales que se vieron rebasados por delincuentes. Atrás quedó la inexperiencia manifiesta de Alfonso Durazo. De la aclarada posición del Ejército. De los 9 muertos entre ellos un elemento del Ejército. De 98 vehículos balaceados de mas 9 incendiados, de 92 despojados. De miles de cartuchos percutidos. De la mas grande angustia y riesgo para la población.

 

El tiempo pasa y las críticas que se convierten en panorama seguirán. Nada de lo que pasó, se puede regresar y evitar.

 

sanchezcarrillo.tv