Otra Vez Ayotzinapa

La Coyuntura |

Sin lugar a dudas el caso de la desaparición física de los cuarenta y tres normalistas de Ayotzinapa dará mucho de qué hablar en los siguientes años, porque será muy difícil que alguien pueda determinar con exactitud que fue lo que verdaderamente ocurrió con ellos. Hasta ahora la única certeza que podemos tener los mexicanos es que ya no están con vida, y lamentablemente durante todo este tiempo se ha utilizado el hecho para mantener una embestida contra el sistema político que representaron tricolores y blanquiazules.

normalistas, iguala, Alejandro Encinas Rodríguez, segob,

¿A quién interesaba mantener vivo el discurso de la desaparición y de la participación del Estado Mexicano? Pues a quien ahora detenta la Presidencia de la República, y quien durante muchos años se mantuvo haciendo activismo y radicalizando grupos sociales que de una u otra manera habían sido abandonados por los programas gubernamentales. Esa fue la base de su presencia y discurso, y podemos señalar que en la mayor parte de las veces estuvo cargado de lugares comunes, verdades a medias, y mentiras completas. De lo que se trataba era de sembrar el odio, y al final lo consiguió.

Para decirlo más claro, en lo personal no creo que el gobierno actual llegue a esclarecer la verdad de lo ocurrido en la noche fatídica de Iguala, pero mantendrá arriba la bandera para seguir conservando ese fervor de los grupos radicales diseminados por todo el país, pero sobre todo, abonando a la mentira que durante tantos años se construyó acerca del destino final de los desgraciados estudiantes que nada tenían que hacer en Iguala porque su principal ocupación era estudiar.

La desgracia los alcanzó en el lugar donde se pacto la Independencia Nacional, y me gustaría insistir que el Paraje de Ayotzinapa está a más de ciento cuarenta kilómetros del lugar en el que se alcanzó la consolidación de lo que hoy conocemos como México. Es evidente que la desaparición física de los cuarenta y tres muchachos ha sido aprovechada por grupos radicales y opositores al régimen anterior para mantener vivo el discurso de la culpabilidad del gobierno encabezado por tricolores y blanquiazules.

Alejandro Encinas Rodríguez, subsecretario de Gobernación y encargado del “Caso Iguala”, descarta vínculos entre los cuarenta y tres desaparecidos y los grupos criminales que operan en la zona, que son muy sangrientos, numerosos, y mantienen presencia de forma permanente porque así se los ha permitido el Gobierno Federal. Y lo digo que no podemos olvidar que el combate al crimen organizado es potestad de la instancia federal, ya que las policías estatales y municipales solamente puede ser coadyuvantes.

Las preguntas que durante los últimos años debimos habernos hecho es:

¿que hacían los estudiantes a ciento cuarenta kilómetros de su Centro de Estudios?

¿Qué fueron a hacer a Iguala y quien los llevo?, y ¿porque tomaron el camión equivocado o quien se los indicó?

Resolver este lamentable hecho es de vital importancia para conocer los detalles de lo que verdaderamente ocurrió. El problema es que al actual gobierno no le conviene resolverlo, porque es una bandera que dará mucho para seguir denostando a los adversarios políticos y su incapacidad para alcanzar la verdad. Los muertos fueron del régimen peñista, y será la principal bandera del régimen lopezobradorista.

¿Querrá Andrés Manuel resolver el caso? No lo creo, porque seguirá siendo una buena causa para evitar a sus adversarios políticos. Al tiempo.

 Vladimir.galeana@capitalmedia.mx