El subsecretario de Derechos Humanos, Migración y Población de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), Alejandro Encinas, advirtió que en México se va a dar un trato humanitario diferente a los migrantes.
“Hay que entender también que la aspiración de muchos de ellos es llegar a Estados Unidos donde ya vimos como los están recibiendo”.
“Aquí no vamos a aventar a la Caballería ni a los Rangers, ni vamos a predicar con la violencia, y menos con sogas etc…aquí van a entrar con trato digno y humanitario como corresponde, a toda persona nacional o extranjera en el Territorio Nacional”.
Encinas Rodríguez, reconoció que el fenómeno migratorio de personas de origen haitiano, que ha llegado a México, en las últimas semanas, son personas migrantes que vienen de países del sur del Continente.
“Particularmente este fenómeno de migrantes de Haití, muchos de ellos provenientes del Brasil, y de Chile, no necesariamente salieron de su país recientemente”
El funcionario, aseguró que, aunque la mayor parte de ellos tienen la intención de llegar a Estados Unidos, en México se están generando las condiciones para que pudieran tener un espacio de integración.
“Como sucedió en años anteriores con la llegada de 30 mil haitianos, a la ciudad de Tijuana y quienes en mayor parte de ellos decidieron, quedarse e integrarse en esa ciudad”.
Dijo que en tres años del actual Gobierno Federal, se han generado diferentes instrumentos migratorios o humanitarios a más de medio millón de extranjeros, a través de la visa humanitaria, el permiso temporal, el permiso de trabajo, las solicitudes de refugio, y otras medidas para facilitar la integración.
“En ese contexto desde que iniciamos el Gobierno en diciembre de 2018, cuando teníamos las caravanas migrantes, particularmente ya en el norte del país, se ofrecieron trabajos y hay una bolsa de trabajo importante, y junto con el ACNUR, hemos abierto programas de trabajo en distintas entidades, particularmente en Coahuila y Nuevo León”.
El funcionario destacó que se debe entender que México ya dejó de ser un país de expulsión o de tránsito en materia migratoria, ya que ahora es un país también de destino.
“Y este cambio, que es un cambio estructural muy importante en la región, nos obliga a plantear los mecanismos de integración de las personas migrantes en nuestro país”.
Encinas Rodríguez, dijo que actualmente en México viven más de un millón de personas extranjeras en el territorio nacional y reveló que la inmensa mayoría de ellos son ciudadanos norteamericanos y no necesariamente de Centroamérica, de Guatemala, El Salvador o de Honduras, que es el pueblo más importante de migración en esta región.
“Por eso el Presidente de la República ha insistido básicamente en atender las causas desde el origen y esto implica no solamente generar las condiciones de trabajo, de desarrollo, en los países expulsores particularmente en el triángulo de Centroamérica, sino también las formas de integración de carácter regional entre la frontera Sur de México y el triangulo Centroamericano”.
Y dijo que el solicitante de refugio debe quedarse en el territorio del país donde lo solicito, y esa figura se puede otorgar en México con la Clave Única del Registro de Población (CURP) para que puedan desarrollar sus labores de trabajo, en tanto tienen respuesta de la COMAR.
El subsecretario se refirió al aval que dio la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para entregar la CURP a migrantes y así integrarlos a las actividades productivas del país, e insistió en que México es país de destino.
“Vamos a dar atención humanitaria y opciones para que se integren a una vida regular en nuestro país”.
Finalmente, lamentó que muchos migrantes son engañados por los llamados “polleros” y los “traficantes de indocumentados”, y tergiversan la información respecto a cómo solicitar refugio en México.
